Autoridades y especialistas determinaron que la modernización del sistema portuario latinoamericano impulsará el comercio, la creación de empleos y los ingresos para los países.
En el marco del XII Congreso Marítimo Portuario el secretario de la Comisión Interamericana de Puertos (CIP) de la Organización de Estados Americanos (OEA), Jorge Durán, señaló que el desafío para los puertos “es adaptarse a los cambios y la modernización tecnológica”.
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Refirió que países latinoamericanos invirtieron en la optimización de los puertos con la intención de perfeccionar e incrementar operaciones, así como mejorar la competitividad y ampliar su actividad a más mercados.
Algunas naciones que innovaron sus instalaciones fueron:
- México, que aplicó un programa de 4,000 millones de dólares (mdd) en 25 proyectos del sector
- Brasil, quien invirtió 2,500 mdd en infraestructura
- Jamaica, que destinó 660 mdd, y
- Bahamas, quien consignó 250 mdd en un patio de contenedores
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Durán consideró que se debe trabajar en los rubros de tecnología, gestión sostenible, conservación del medio ambiente, protección y seguridad física y digital de las instalaciones.
La modernización de infraestructura y operaciones es necesaria porque la ampliación del Canal de Panamá –en junio de 2016– trae como reto convertirse en “hubs” logísticos regionales, lo que implica realizar inversiones para transformarse en centros logísticos capaces de recibir navíos de mayor envergadura.
“La mejor operación de los puertos supone beneficios para los consumidores, que tendrán productos novedosos y a menor costo, los agentes navieros, las empresas marítimas, las terminales y los puertos de la región”, otorgando movimiento comercial y económico para los estados.
Finalmente, el consultor Eduardo Lugo coincidió en que la modernización portuaria es fundamental para apoyar el comercio exterior por la vía marítima porque “el comercio crece aún de manera lenta, pero los países de la región deben prepararse para el repunte de la economía mundial”.
