"Está en chino"… el virus contagia

Controlar la pandemia conllevará la reactivación de las economías de países afectados

México enfrenta un escenario preocupante, pues se asocian factores externos e internos que enrarecen las posibilidades de crecimiento y desarrollo. Como factores externos están el coronavirus –denominado como Covid-19 –, los desajustes en los precios del petróleo, la caída en los mercados financieros y las afectaciones en los tipos de cambio; como internos siguen sobresaliendo la inseguridad y las malas señales de gobernanza, así lo expresa y sustenta el licenciado Carlos E. Palencia Escalante, Socio Director de CEO Consultoría Estratégica & Outsourcing, en el siguiente análisis económico integral.

Impacto en China

Empiezan a aparecer los datos de las repercusiones por el Covid-19. La venta de automóviles en el mercado doméstico tuvo una caída equivalente al 80 % en febrero, porque se vendieron unos 300,000 autos cuando un año antes en el mismo mes fueron 1.5 millones; en otras palabras, se dejaron de vender 1.2 millones de unidades en un solo mes.

Pero no solo la industria automotriz está siendo afectada. Se estima que si la economía disminuye 2 % anual en el primer trimestre (creciendo apenas a una tasa anual de 2 a 3 %) se estarán perdiendo hasta 76 mil millones de dólares, lo que es relevante porque China representa una quinta parte del PIB mundial.

De ahí que prácticamente ningún país pueda librar la crisis.

Conmoción global

Si continúa la contingencia epidemiológica, mundialmente la estimación de daño al PIB en el primer trimestre de este año es de hasta 280 mil millones de dólares, lo que significaría que el PIB mundial no crezca por primera vez desde el 2009, cuando vivimos la “Gran Recesión”.

Que no se profundice el impacto dependerá de que tan rápido se contenga el virus dentro y fuera de China; de cuan pronto se restablezcan las autorizaciones de viajes de negocios y turismo lo que ayudaría en la capacidad de recuperación de las aerolíneas; de que tan pronto se restablezcan las cadenas de suministro; de que tan ágiles sean las negociaciones y acuerdos entre los productores de petróleo; y de que tan veloz se recupere la confianza de los inversionistas y consumidores.

Cerca de China, los que por su comercio y codependencia pueden salir mejor librados se dice están Filipinas, India e Indonesia. Paradójicamente, países físicamente alejados del centro de contagio tienen más vulnerabilidad: es el caso de América Latina, porque China es el principal socio comercial de varios países. Ejemplos hay varios: Chile sobresale por sus exportaciones de salmón y frutas que no puede colocar por estar cerrados varios puertos o porque no hay trabajadores para hacer las descargas; productos minerales de Perú y Ecuador, algunas manufacturas de Brasil y varias naciones proveedoras al país asiático de soya, productos agropecuarios, combustibles, minerales de cobre y hierro, pasta de celulosa, carnes, materias primas, etc., de Venezuela, Uruguay, Bolivia y Argentina, entre otros. Así, puede decirse que el virus esparcido por China amenaza proporcional y globalmente más fuerte a América Latina que esperemos a México o Estados Unidos de América (EUA).

Pero el comercio y las afectaciones son en doble sentido. La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) señaló el pasado 4 de marzo, que las exportaciones de bienes intermedios de China se redujeron en febrero un 2 %, lo que se estima un impacto por 50 mil millones de dólares en diversas industrias a lo largo y ancho del mundo: para México, se estima el costo fue de 1,369 millones de dólares. El cuadro indica el efecto en diversos países.

Cadena de

suministro chino en:

Valor de impacto por no

abastecimiento
(mdd)

Unión Europea

15,597

EUA

5,779

Japón

5,187

Taiwán

2,645

Vietnam

2,296

Singapur

2,165

México

1,369

 

Fuente: UNCTAD. https://unctad.org/en/PublicationsLibrary/ditcinf2020d1.pdf

En pocas palabras, se dice que China está generando un efecto dominó porque su producción es primordial para las cadenas de suministro, y además es potencia manufacturera mundial.

Hay más afectaciones fuera de la industria manufacturera. El mercado financiero y de valores va en retroceso, lo mismo en EUA que en los mercados europeos y asiáticos (y el mexicano, por supuesto). El precio del petróleo también ha sido afectado en buena parte porque el gobierno ruso no estuvo dispuesto a reducir más su producción petrolera, generando una guerra de precios en contra de los productores shale en EUA, de quienes se dice se han aprovechado de las medidas de la OPEP y sus aliados fuera del cártel (OPEP+) incrementando su producción a niveles históricos, en tanto los productores agrupados han estado perdiendo participación en el mercado mundial.

Las reacciones mundiales en varios frentes son porque hay incertidumbre y porque el escenario pinta a que deberán tomarse medidas más restrictivas para controlar la expansión de la pandemia: es el caso de Italia, en donde se ha restringido la movilidad de casi 16 millones de personas tratando de hacer algo similar a China que contuvo el aislamiento de más de 50 millones de personas, lo que indudablemente generó afectaciones sobre las cadenas de suministro.

Volviendo al PIB del mundo, se dice que puede reducirse el crecimiento entre medio y un punto porcentual en este año, y por los efectos en el 2021 podría disminuir otra tercera parte de un punto porcentual; aún con ello, se prevé que la economía mundial pueda crecer el 2.4 % este año y 3.3 el próximo. Efectivamente, el mundo registrará menor crecimiento y por ello la OCDE redujo las estimaciones cuando meses antes pronosticaba 2.9 %; incluso no descarta la posibilidad de que el primer trimestre sea negativo.

Pero siendo honestos, el impulso, la recuperación de la economía, no se resolverán reduciendo tasas de interés o inyectando recursos para que los mercados de capitales no caigan: el objetivo de la cooperación mundial debe ser contener la infección, evitar la propagación, implementar efectivas medidas de salud pública y encontrar la vacuna para curarla.

 

Dato previo
(nov. 2019)

% nueva estimación

Mundo

2.9

2.4

Alemania

0.4

0.3

China

5.7

4.9

Estados Unidos

2.0

1.9

India

6.2

5.1

Italia

0.4

0.0

Japón

0.6

0.2

MÉXICO

1.2

0.7

 

Fuente: OCDE

 

 

México no se escapa

Aunque en evidente retroceso, el 2.4 % es una cifra favorable para el mundo y que ya quisiéramos alcanzar en nuestro país, pues el año pasado retrocedimos -0.1 % y para este, por lo que estamos viendo, no se tiene una perspectiva más favorable porque pudiéramos crecer 0.7 o tal vez menos.

En nuestro país, por ejemplo, el retraso en importaciones son un primer indicio de las afectaciones en la cadena de suministro/proveeduría que vinculan a empresas exportadoras como las IMMEX con los países asiáticos. Esto particularmente en las industrias automotriz y electrónica, las que es difícil tengan inventarios para más de un mes, en el mejor de los casos, toda vez que también varios de los componentes vienen de Japón y Corea en los que podría haber desabasto colateral.

Y ya que se mencionan las empresas IMMEX, no hay que perder de vista que regiones como el Bajío se han ido concentrando en la industria automotriz terminal y en autopartes, las que representan entre 25 y 80 % de la producción total manufacturera en algunos estados de esa zona.

 

Estado

Sector automotriz como % de la

industria manufacturera

Valor en millones de pesos

Aguascalientes

80

242,318

Guanajuato

50

384,631

Querétaro

25

87,202

San Luis Potosí

50

177,157

 

Fuente: datos de INEGI

La industria electrónica es otro sector con riesgo de contagio porque además está en estados como Jalisco y en ciudades de la frontera norte. Se están detectando afectaciones pues como sector es la que más depende de importaciones chinas en particular y asiáticas en general, ya que algunas partes y componentes tampoco se fabrican en los EUA ni en Canadá. Incluso, cabe mencionar, que si aumentaran la regla de origen en el T-MEC difícilmente podría surtirse la región de un alto porcentaje de los insumos. Aquí unos datos: cerca del 42 % de los componentes electrónicos que México importa provienen de China, con valor superior a los 70 mil millones de dólares de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía y del Centro de Estudios China-México de la UNAM. Esto abre la oportunidad para que estratégicamente captemos inversiones para líneas de producción de proveedores en nuestro territorio, pero primero controlemos el virus.

Así las cosas, ya hay algunas afectaciones, por ejemplo, en empresas de manufactura de exportación de Chihuahua y Jalisco, particularmente en este segundo estado se han retrasado embarques desde China, toda vez que si bien llegan por empresa aérea de Hong Kong (Cathay Pacific) tienen su origen en ese país.

Siguiendo con la UNCTAD, por la disminución en la proveeduría desde China, las exportaciones mexicanas afectadas por 1,370 millones de dólares están en 13 actividades predominantemente manufactureras.

El siguiente es un cuadro resumen de esos impactos. 

 

Sector/actividad

Impacto estimado en exportaciones

(mdd)

Automotriz

493

Maquinaria eléctrica

341

Maquinaria diversa

228

Equipo de comunicación

71

Maquinaria de oficina

58

Instrumentos de precisión

57

Muebles y productos de madera

52

Caucho y plástico

26

Productos metálicos

23

Químicos

16

Productos de papel

2

Textiles y vestimenta

2

Productos de cuero

1

 

Fuente: UNCTAD. https://unctad.org/en/PublicationsLibrary/ditcinf2020d1.pdf

Ahora bien, siendo que ya se capta el impacto para nuestro país, el Secretario de Hacienda ha propuesto impulsar recursos al sector salud, pero también otras medidas económicas, aunque aún no se sabe cuáles. No se conocen porque reducir las tasas de interés compete al Banco de México no a esa secretaría, en caso de querer rebajarlas en concordancia a lo hecho por la reserva federal en Estados Unidos.

Salud enfermiza

No todo es economía, puede ser otra premisa en este análisis. En México habrá un antes y un después por el Covid-19 si no se reacciona a tiempo, si el gobierno sigue pensando qué hacer. Esto porque la consultora Aregional recién señaló que poco menos de 100 mil millones de pesos (98,793) fueron gastados el año pasado en salud sin las mejores prácticas de trasparencia, es decir, carentes de marco regulatorio, sin estrategia programática-presupuestal ni bajo rendición de cuentas.

Panorama preocupante ante la pandemia definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que el gasto público en salud representa el 2.8 % del PIB y fue un 10.4 % del gasto total gubernamental del año pasado. Alarmante lo que estaríamos enfrentando porque hay carencia de padrón de proveedores, de servicios paralelos o subrogados, baja o nula transparencia en la adjudicación de obras y retraso en la adquisición de servicios para atender la salud y productos, incluidos los medicamentos. Todo por una incomprensible austeridad republicana con enfoque de rescate a Pemex o seguir perdiendo atención en un avión. A eso súmenle que se autorizaron compras de medicamentos desde el extranjero sin registro sanitario y no es robusta nuestra estructura médico-hospitalaria.

Por eso es oportuno retomar que el Secretario de Hacienda ha dicho que, para contrarrestar el coronavirus, planean ejercer el gasto público lo más rápido posible… pero no olvidemos que el año pasado se generó un subejercicio que evidentemente provocó el estancamiento. Además, en enero de este año el gasto público mostró un subejercicio de 5 % respecto a lo programable.

¿Para qué declarar eso? ¿Para qué esperar la rifa de un avión que no se rifará y hasta septiembre se asignarán los 2,000 millones de pesos al sector salud? ¿La contingencia del Covid-19 y el estancamiento económico pueden esperar? No, no pueden posponerse acciones y menos cuando la salud y la vida están de por medio.

Por cierto, para terminar ¿En dónde se quedó el peso fortachón?

Comentarios finales

El pesimismo y la crisis mundial podrán ir disminuyendo a partir de finales de abril cuando llegue el verano a China y el calor haga más difícil la propagación, lo mismo en países como EUA, México y en la Unión Europea, por lo que pudiera darse una recuperación económica, aunque sea leve, en la segunda mitad del año.

Esa es una esperanza, y queremos todos que mejoren las cosas. Mientras tanto, el gobierno chino tiene el doble reto de controlar el contagio del Covid-19 y estimular la economía usando la reducción en la tasa de interés, el aumento del déficit público e inyectando miles de millones de dinero a su economía y los mercados. Esto seguramente lo replicarán otros países.