El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, dijo que si desde el primer día del proceso de renegociación del Tratado de Libre Ccomercio de América del Norte (TLCAN) se dejan los objetivos claros que modernicen el acuerdo, se dará tranquilidad a los mercados.
El funcionario indicó que el gobierno federal buscará definir los objetivos, es decir, "si lo que pretendemos es mejorar los esquemas de valor producidos en América del Norte, si lo que pretendemos es modernizar un acuerdo que hace 23 años no tenía temas como comercio electrónico, los nuevos modelos de propiedad intelectual, telecomunicaciones y energía, hoy que América del Norte tiene una fortaleza energética que hace 23 años no tenía; si somos capaces desde el inicio de la negociación de definir sus objetivos y dejar claramente canceladas aquellas cosas que no favorecen al avance del libre comercio, como empezar a regresar a los años 70 como meter cuotas, de usar los aranceles como medidas proteccionistas, si somos capaces desde el día uno del inicio de este proceso de definir objetivos claros, eso le dará tranquilidad a los mercados".
Respecto a la propuesta del ajuste transfonterizo en el que Donald Trump pretende imponer gravámenes a diversos productos para que a partir de esto se pueda construir el muro, el Guajardo dijo que esta medida se ve poco probable.
"Lo que yo escuché en Washington es que no hay claridad de que esa sea la ruta para la reforma fiscal de Estados Unidos"; sin embargo, el pasado martes refirió que esto no podría concretarse: "Yo he hablado con muchos colaboradores del presidente de Estados Unidos y no encontré que haya uniformidad en su pensamiento en relación a un impuesto a flujos que favorezca exportaciones y discrimine importaciones".
Reiteró que en este momento, "la ley que impera es la actual, NAFTA son las reglas de juego".
Guajardo acudió a la Casa Blanca junto con el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, a encabezar las primeras negociaciones sobre el futuro de la relación bilateral entre México y Estados Unidos.
Cabe recordar, que los dos de los ejes de la campaña de Trump fueron la renegociación del TLCAN y la construcción de un muro fronterizo “que México pagará”.
Estos dichos presionaron al peso mexicano, pues desde el triunfo de Trump la moneda mexicana perdió 14.1 % de su valor frente al dólar, y en consecuencia se produjo una salida de inversión estadounidense del país.
Con información de Expansión
