Como se recordará, el año pasado el titular de la Secretaría de Economía descartó la posibilidad de firmar un Tratado de
Libre Comercio con Corea del Sur, pero no así de un acuerdo comercial limitado de fracciones arancelarias interesantes para el país (principalmente en el sector agropecuario y de alimentos elaborados). Así las delegaciones de los gobiernos de México y Corea del Sur, iniciaron la segunda ronda de negociaciones a mediados de abril del presente año, con miras al Acuerdo Estratégico de Complementación Económica (AECE).
Durante la ronda se intercambiaron opiniones en temas de comercio de bienes; servicios y movilidad de personas de negocios; inversión; normas y evaluación de la conformidad; política de competencia y derechos de propiedad intelectual; así como sobre las medidas de cooperación económica bilateral (promoción del comercio e inversión; agricultura y pesca; pequeñas y medianas empresas; educación, capacitación técnica y vocacional; tecnologías de la información y comunicación; ciencia y tecnología, y turismo).
Si bien falta mucho por negociar en próximas rondas, se tiene conocimiento que de firmarse un Acuerdo comercial, se incrementarán las exportaciones de bienes mexicanos al mercado coreano en productos pesqueros, agropecuarios, vinos, mezcal, tequila y cerveza; productos orgánicos; aditivos para comida y pigmentos orgánicos; materiales para la construcción y productos químicos; cuero y su manufacturas.