El arbitraje es, sin lugar a dudas, el sistema de solución extrajudicial de controversias de carácter internacional de mayor utilización en el ámbito empresarial. La demanda de arbitraje crece, año tras año, a medida que se desarrollan los intercambios internacionales.
La eficacia del arbitraje obedece a la rapidez en la solución del conflicto, lo que conlleva menos costos, y en que las partes pactan en condiciones de igualdad sobre cinco ámbitos esenciales del procedimiento:
- la sede del arbitraje,
- el idioma del arbitraje,
- las reglas del procedimiento y el derecho aplicable,
- la nacionalidad de los árbitros, y
- la representación jurídica.
Otro elemento que destaca de este procedimiento es la confidencialidad, ya que las audiencias son privadas y solamente las partes involucradas conocen el laudo.