Los ingresos que planea tener el gobierno federal en 2015 prevén un aumento de 7% en los ingresos tributarios, los cuales totalizan 1.97 billones de pesos, que compensarán –parcialmente- una previsible disminución de los ingresos petroleros.
El proyecto de Ley de Ingresos de la federación para el próximo año, presentado la semana pasada ante el Congreso, considera que el gobierno federal tendrá un total de 4.67 billones de pesos, de los cuales 1.97 billones corresponderán a impuestos, es decir, el 42.1% del total de los ingresos presupuestados para 2015 tendrá un origen tributario.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público prevé recaudar 1.05 billones pesos por Impuesto Sobre la Renta (ISR); 703,848 millones de pesos por Impuesto al Valor Agregado (IVA); 156,704 millones de pesos por el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IESPS), y 27,875 millones de pesos de impuestos al comercio exterior.
Según la Secretaría de Hacienda, el incremento en los ingresos fiscales que ha generado la implementación de la reforma hacendaria en 2014 reducirá el impacto negativo por la baja en los recursos petroleros prevista para el próximo año.
El titular de esa dependencia, Luis Videgaray Caso, reconoció que para 2015 se pronostica un nivel de ingresos petroleros menor al estimado en el cierre de 2014, debido a que bajará la producción de crudo de Petróleos Mexicanos.
La elaboración de la Ley de Ingresos de 2014 contempló una plataforma de producción de petróleo de 2.52 millones de barriles diarios, lo que se reducirá a 2.4 millones de barriles diarios en 2015.
“Esta reducción a la expectativa de producción de Petróleos Mexicanos implica una disminución en los ingresos petroleros, equivalente a 91,500 millones de pesos”, detalló Videgaray.
Sin embargo, dijo que pese a la inesperada caída en los ingresos petroleros, “gracias a los recursos que provienen de la reforma hacendaria, es posible mantener en 2015, el nivel históricamente alto de inversión productiva”.
