La economía de México crecerá alrededor de 3.3% en 2012, debido a la influencia de un entono global “más débil e incierto”, a pesar de que en términos generales México “se encuentra lejos de la fuente de incertidumbre europea”, considera un estudio del grupo financiero BBVA.
Sobre la estabilidad monetaria, el análisis reportó que no se descartan “episodios de volatilidad global que deprecien el peso”, por lo que parecería “razonable que el tipo de cambio se mantenga en niveles cercanos a 12.0-12.5 pesos por dólar en promedio”.
El análisis consideró que “las economías emergentes siguen creciendo con fuerza apoyadas por la resistencia de la demanda interna”, aunque no debe descartarse que puedan verse afectadas por las turbulencias en Europa y Estados Unidos.
Para el cierre de 2011, el grupo financiero estimó que México tendrá una expansión de 3.8% debido a un menor impulso de las exportaciones no petroleras.