La irrupción masiva y cotidiana de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC’s), así como de la televisión e Internet, provocan que los “nativos digitales” (por haber crecido en un mundo tecnológico), reciban y envíen información de manera natural e intuitiva.
Sin embargo, esos contenidos la mayoría de las veces se envían y reciben en forma abreviada o codificada, “lo que les impide transitar a la adquisición real del conocimiento”, aseveró Estela Morales Campos, coordinadora de Humanidades de la UNAM.
La especialista indicó que el uso exhaustivo de Facebook, YouTube y otras redes sociales, “ha intensificado la lectura de los mensajes de texto cortos, que disminuyen el tiempo libre que los jóvenes podrían dedicar a conocer el mundo, o acercarse al conocimiento universal o local a través de textos amplios y reflexivos”.
Morales comentó que en América Latina, que tiene una población de casi 600 millones de habitantes, los usuarios de Internet son poco más 254 millones, es decir, menos de la mitad de las personas que habitan la región.
De hecho, en México sólo 37 millones de personas, de 110 millones, utilizan Internet, destacándose los jóvenes de entre 13 y 17 años que envían y reciben unos 3,300 textos (mensajes) por mes, y las mujeres, poco más de 4,000, “aunque en general son textos abreviados, y no literarios o científicos”, apuntó Morales Campos.
Es por eso que se puede concluir que el entorno tecnológico que envuelve a la juventud “fomenta una nueva comunidad iletrada o analfabeta”. Además, los recursos digitales -como medio de inclusión social- permiten cerrar la brecha de exclusión entre usuarios y no usuarios de Internet.
