Por: Ivonne Vargas
Actualmente el 40% de las empresas familiares en México se encuentra en riesgo de desaparecer, debido a que no tienen resuelto el relevo en la dirección de su negocio, según una encuesta del grupo Banamex.
Sólo el 15% de las Pymes en el país están a cargo de la tercera o cuarta generación, y el 85% se encuentra bajo la dirección del fundador o de la segunda generación. Contratar a un director que no comparta los lazos consanguíneos es una práctica poco común en el ámbito corporativo mexicano, refirió el informe.
Por su parte, el socio responsable de soluciones a empresas familiares de la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) aseguró que los directores deben cambiar su estructura de pensamiento, además si quieren maximizar utilidades deben anticiparse a riesgos que limitan su crecimiento, como no tener el relevo que crezca o consolide el negocio.
Otra de las áreas en las que el empresario familiar debe prestar atención, es romper la tradición de que una sola persona tome las decisiones administrativas, pues no delegar responsabilidades incrementa la probabilidad de cometer errores. Lo mejor es que existan órganos colegiados de varios miembros.
La línea que separa a la familia de la empresa es muy poco clara para algunos negocios en el país. Para cambiar esa mentalidad hay que hacer un plan de institucionalización.
Con información de CNN Expansión
