Se despide la publicidad de comida chatarra en la TV

La SSA precisó que saldrán del aire 10,233 anuncios que eran transmitidos en horario infantil

El horario de restricciones para la televisión abierta y cable va desde las 14:30 a las 19:30 horas de lunes a viernes
 El horario de restricciones para la televisión abierta y cable va desde las 14:30 a las 19:30 horas de lunes a viernes  (Foto: Redacción)

La transmisión de publicidad de refrescos, botanas, confitería y chocolates fue eliminada desde esta semana en salas cinematográficas y televisión abierta del país, durante el horario infantil.

En un comunicado, la Secretaría de Salud aseguró que el objetivo de la restricción es proteger la salud de los niños, y evitar futuras enfermedades relacionadas con el sobrepeso y la obesidad.

Asimismo, detalló que el horario de restricciones para la televisión abierta y cable va desde las 14:30 a las 19:30 horas de lunes a viernes, y en fines de semana de 7:00 a 19:30 horas; mientras que en el cine aplica para películas con clasificación A y AA.

“Con esta medida se eliminarán de la barra infantil 55 de las 139 horas anuales de programación televisiva, lo que equivale a 40% de la pauta publicitaria (…) en términos de spots estamos hablando de que saldrán del aire 10,233 anuncios”, informó la secretaría.

De igual forma, mencionó que solo podrán publicitarse en programas infantiles los productos que cumplan con los criterios nutrimentales.

En ese tenor, el titular de Comisión Federal para la Protección contra Riesgo Sanitarios (Cofepris), Mikel Arriola anunció que el sello para productos con alto valor nutrimental será otorgado únicamente a artículos saludables.

“Al día de hoy se han recibido 97 solicitudes de sello, de las cuales se han otorgado 9 a productos Liconsa, se han rechazado 11 y se encuentran en proceso de dictamen 77”, apuntó el funcionario.

En materia de etiquetado, explicó que en 2015 las empresas tendrán que reportar claramente la fuente de la cual provienen las calorías en el producto; es decir, deberán señalar de manera obligatoria cuantas azúcares, grasas y grasas saturadas contienen los alimentos y bebidas.

“El nuevo etiquetado únicamente transparenta el contenido real del producto para que el consumidor tome sus mejores decisiones”, aseveró Arriola.