Por Mauricio Hernández
El no publicar precios de los productos con claridad, confundir al consumidor y no hacer efectivas las garantías son ejemplos de actividades de los oferentes de bienes y servicios en Internet, mismas que serán vigiladas por la Profeco y la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) con el objeto de proteger a los compradores, vendedores y prestadores de servicios en la web.
El dirigente de la Profeco, Ernesto Nemer Álvarez, dijo que ante el incremento de internautas en el país, se trabaja en la regulación y protección de las actividades que se dan por esta vía, por ello “la autoridad no sólo debe estar esperando recibir denuncias, también tiene que acercarse a quienes realizan acciones de comercio electrónico el cual ha crecido de manera significativa”.
Funcionarios de la Profeco se presentaran durante el Foro IDC, “Las empresas ante los retos legales del mundo digital”.
Asimismo, con el objeto de la concientización del comercio digital, ambas instituciones trabajarán para que se brinde certeza y seguridad: “sabemos que esta actividad va en aumento, para eso regularemos con capacitaciones gratuitas tanto a proveedores como compradores de servicios y así incrementar la confianza”.
De acuerdo con los datos dela AMIPCI, de los 65 millones de internautas en el país, el 33% tiene como actividad favorita las compras de artículos en línea.
Respecto a las quejas registradas (2%) son debido a que el paquete que se compra no es respetado en los términos que establece la empresa, cobros excesivos y cortes repentinos de llamadas.
Por su parte, la presidenta de la AMIPCI, Cintya Martínez, señaló que “no es el primer convenio que se firma con esta autoridad, sí es el más importante por el alcance y compromiso por parte de ambos órganos. Lo que tiene de novedoso es que con este convenio, por ejemplo, ya trabajaremos en una lista de las empresas que estén incumpliendo o que estén cometiendo irregularidades”.
Algunas acciones que aplicará la entidad es la promoción de medidas de solución inmediata, revisiones a los sitios de internet mediante “sellos de autorregulación así como también las empresas que no cuenten con esta garantía”.
Con información de Expansión
