¿De viaje y sin seguro?
No cuestan mucho, aunque varían según el tipo de cobertura, la edad y el destino
Corporativo
Si ya tienes tu viaje planeado y eres precavido, con tiempo ya tendrás una revisión del auto en el que saldrás hacia tu destino o un itinerario para llevar a cabo, así como números de emergencia en caso de algún percance. ¿Olvidas algo? Quizá, si no cuentas con un seguro de viaje.
¿Por qué contratarlo?
Es una herramienta que te protege y te asiste en casos de necesidad. Se idearon dependiendo del tipo de exigencia de cada usuario en diferentes paquetes y precios. Estos pueden contener repatriaciones sanitarias o administrativas, el reembolso por vuelos cancelados o demorados, asistencia legal, cuidado de equipajes, entre otras opciones.
¿Para quién?
Para personas que no viajan con mucho se recomienda contratar un paquete que cubra una estadía corta, según el sitio en línea para cotizar seguros, Plaza de Seguros.
Asimismo, si sufres un accidente o adquieres una enfermedad o condición que requiera atención médica mientras estás en el extranjero, tendrás que cubrir los gastos que se generen por tu propio bolsillo.
"Por ello, a la hora de viajar, tener un seguro es tan esencial como llevar tu pasaporte", explica la Secretaría de Relaciones Exteriores en su guía del viajero.
¿Qué debes considerar?
Para elegir el paquete más adecuado a ti y a tu viaje, debes evaluar los riesgos que deseas cubrir y así buscar el costo mínimo. Debes tener en cuenta en la comparación si el seguro incluye asistencia en viaje, pues es un factor que aumenta el costo del producto.
Los seguros suelen tener límites de edad mínimos o máximos, por lo general hasta los 60 o 65 años. Por encima de esa edad, la mayoría de los seguros o no se emiten, o se debe de pagar una prima mayor. Los seguros más económicos son para jóvenes, aunque algunos no cubren deportes o actividades de alto riesgo.
¿Qué beneficios debes obtener?
La asistencia debe ser completa e integral, por lo que debe incluir aspectos tan comunes como un dolor de cabeza hasta la cancelación o demora de un vuelo.
Algunos incluyen estos aspectos:
- cancelación o modificación de la estancia por razones ajenas a quien contrata el seguro, como enfermedad, accidente o incidente de un familiar, pareja o compañero de viajes; si tienes que tomar parte en un juicio como testigo; incendio, robo o daño inesperado en tu domicilio; si pierdes tu trabajo. Algunos planes no permiten cambios cualquier modificación supone la pérdida total del billete o a veces el pago de una multa.
- gastos médicos: suele referirse a los gastos básicos, pero no cubre una estancia prolongada, donde es preferible la repatriación.
- muerte durante el viaje, incapacidad permanente o repatriación: puede alcanzar un alto costo en caso de no tener un seguro.
- pérdida de equipaje: normalmente cubre la pérdida, demora o extravío que afectan al 1% de los pasajeros de líneas aéreas, aunque no lo cubre en caso de transporte terrestre.
- pérdida por robo o daños: suelen estar cubiertos de forma normalizada, salvo para América del Sur y otras zonas consideradas de riesgo, excepto si los hechos se produjeron en el avión.
Antes de partir
Comprueba que llevas la póliza original y los números de emergencia junto con tus documentos. Deja en tu hogar una copia de la póliza y documentos originales a alguna persona de confianza (lo ideal sería que estén legalizados ante notario).
También puedes subir una copia escaneada a tu cuenta de mail en internet por si la necesitas en ese formato donde quiera que estés.
¿Cuánto cuesta?
No suele tener precios altos, pero varía de acuerdo con el tipo de cobertura requerida, la edad de la persona, el destino, la duración de la estadía, condiciones médicas pre-existentes y el grado de riesgo de actividades que se realizarán.
Un seguro de viaje nacional puede ir desde 247 pesos para una persona por diez días hasta los 1,011 pesos de manera familiar. Si tu viaje es internacional, a un destino más allá de los tradicionales, el costo puede ir desde los 700 pesos por persona hasta 930 pesos, dependiendo del destino.