Anticorrupción: negocio para su empresa

Beneficios y recomendaciones para implementar medidas para combatir y evitar la corrupción

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 .  (Foto: IDC online)

Preámbulo

Suele pensarse que la corrupción solamente proviene del sector público y de las actividades relacionadas con el mismo. Sin embargo, las personas físicas y morales juegan un papel preponderante en el incremento de la corrupción o bien en su combate, ya que del sector privado depende en gran medida la aceptación de estas prácticas malsanas propuestas por terceros, o bien el promover por sí mismo actos de corrupción para obtener resultados más rápidos que los normales, tanto en sus relaciones públicas como privadas.

En estas épocas tan complicadas, la corrupción se convierte en una salida aparentemente fácil para las empresas; sin embargo, evitar y combatir la corrupción genera muchos beneficios, incluyendo mayores oportunidades de negocio.

Actos de corrupción de las empresas en números

El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) realizó un trabajo sobre los costos de corrupción para las corporaciones en México denominado: “Encuesta de Gobernabilidad y Desarrollo Empresarial”, mismo que fue publicado en agosto del 2005. Dicho estudio tuvo entre otros resultados, los siguientes:

  • el 13% de las empresas encuestadas reconoció que realiza pagos extraoficiales para influir a funcionarios públicos a nivel federal. Desde su perspectiva, las empresas gastan en promedio, 6.1 de sus ingresos en la corrupción burocráticaadministrativa con el gobierno federal;
  • las grandes compañías realizan pagos extraoficiales en 15% del total de servicios públicos que utilizan. El resto de las empresas lo hacen en 17%;
  • los trámites y servicios federales en los que se registra mayor incidencia de actos de corrupción son aquellos relacionados con agilizar la conexión de servicios públicos; obtener contratos gubernamentales no licitados; ignorar violaciones a diversas disposiciones (seguridad laboral, regulaciones laborales, normas ambientales);
  • el 20% de las agrupaciones reconocieron que realizan pagos extraoficiales para influir en el contenido de nuevas leyes, políticas y regulaciones. Según lo reportado, estas empresas gastan en promedio un 6% de sus ingresos en dichos gastos, y
  • el 10% de las entidades reconoció que realizan pagos extraoficiales para infl uir a funcionarios públicos y gastan hasta 5.3 de sus ingresos en la corrupción burocrática administrativa. A nivel municipal, el 11% de aquéllas reconocieron que realizan pagos extraoficiales para influir a funcionarios públicos. La corrupción con funcionarios municipales representa, en promedio, 4.3% de sus ingresos.

Las empresas más comprometidas con la reinversión están preocupadas en combatir la corrupción más que aquellas que simplemente hacen negocios pasajeros; están más dispuestas a contribuir para eliminar la corrupción del sector público.

Corrupción vista desde las cámarasempresariales

Por su parte, la Cámara de Comercio Servicios y Turismo de la Ciudad de México en su publicación: “La Seguridad en el Comercio de la Ciudad de México” (1er. Trimestre de 2006, Enero-Marzo) publicó la percepción del grado de corrupción en nuestro país, en el siguiente sentido:

“De acuerdo a las opiniones expresadas por los empresarios durante las entrevistas, sobre la percepción del grado de corrupción en nuestro país, el 81.6 de los empresarios entrevistados consideró que la corrupción en México es alta, lo que representa un aumento de 5.1 puntos porcentuales con respecto al trimestre anterior, mientras que el 17% mencionó que es regular y el 1.4% que es baja.

Por otra parte se cuestionó a los empresarios si han sido presionados para dar algún tipo de dádiva a la autoridad para agilizar o conseguir algún trámite relacionado con su negocio.

El 27.2% de los empresarios contestó afirmativamente. De este total, el 64.7% dijo haber sufrido esta práctica con servidores públicos locales mientras que el 35.3% lo hizo con servidores públicos federales.”

Actos e instrumentos “anticorrupción”

Como resultado de las funestas consecuencias que la corrupción acarrea tanto para gobiernos como para particulares, en los últimos años la comunidad de negocios, inversionistas, empresas, consumidores y los propios países, así como organismos internacionales, se han preocupado por combatir frontalmente a la corrupción, definiendo lineamientos, logrando acuerdos e instrumentando herramientas legales y normativas que apoyen la eliminación de este mal (independientemente de las razones éticas), para permitir la competencia comercial equitativa, transparente y sana que la corrupción impide.

Algunos de los esfuerzos en contra de la corrupción que han logrado ver la luz son:

  • el Pacto Mundial, proyecto que surgió durante el Foro Económico Mundial de 1999 como una iniciativa del Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, con el fi n de convocar a la comunidad empresarial del mundo a sumar esfuerzos con esta organización, sus gobiernos y los sectores social y laboral para impulsar a las empresas a la adopción de 10 principios en materia de derechos humanos y laborales, medio ambiente y combate a la corrupción;
  • Líneas Directrices para Empresas Multinacionales de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), la OCDE elaboró líneas directrices para empresas multinacionales, a fin de crear un ambiente más propicio para la inversión internacional. Bajo estos lineamientos, los gobiernos establecen recomendaciones de conducta corporativa responsable en los diversos ámbitos de la operación empresarial;
  • la Convención Interamericana contra la Corrupción, fi rmada por México en 1996, tiene como objetivo principal promover y fortalecer, en cada uno de los Estados signatarios, el desarrollo de mecanismos necesarios para prevenir, detectar, sancionar y erradicar la corrupción;
  • la Convención para Combatir el Cohecho de Servidores Públicos Extranjeros en Transacciones Comerciales Internacionales de la OCDE, conocida como Convención Anticorrupción de la OCDE, tiene como propósito ofrecer condiciones de sana competencia para las empresas y favorecer la instrumentación de políticas anticorrupción en los sectores público y privado de las naciones. Uno de los aspectos torales de esta Convención es que, además de armonizar las legislaciones penales para combatir el delito de cohecho internacional, contiene provisiones no penales para promover una cultura de transparencia entre las empresas;
  • la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción, firmada por México en 2003 y ratificada por el Senado en 2004, tiene diversas fi nalidades entre las que se encuentran:
    • fortalecer la cooperación internacional a través de la adopción y las medidas para prevenir y combatir eficaz y eficientemente la corrupción;
    • penalizar una amplia gama de actos de corrupción;
    • facilitar y apoyar la cooperación internacional para la extradición;
    • preveer asistencia técnica en la prevención y la lucha contra la corrupción;
    • proporcionar asistencia jurídica recíproca en la recuperación de activos y el decomiso del producto del delito, y
    • promover la integridad, la obligación de rendir cuentas y la debida gestión de los asuntos y bienes públicos, y
  • las Reglas Anticorrupción de la International Chamber of Commerce (ICC), para combatir la extorsión y el cohecho, (Reglas Anticorrupción ICC) que:
    • son reglas reconocidas a nivel internacional;
    • su objeto es que las empresas se autorregulen en materia de combate a la corrupción, en complemento y apoyo al cumplimiento de las leyes nacionales, y
    • su aceptación voluntaria por las empresas permite altos estándares de integridad en las relaciones comerciales públicas y privadas de las empresas.

Dentro del contenido de tales reglas se incluyen:

  • la definición de soborno, cohecho y otros actos de corrupción y la prohibición general de actuar indebidamente ante terceros, sean entes públicos y privados;
  • la necesidad de difundir las reglas ICC a terceros con los que se tienen relaciones de negocios tales como agentes e intermediarios para evitar que éstos se conviertan en operadores de actos de corrupción;
  • la aplicación de las reglas en materia de joint ventures, contratos de prestación de servicios; contribuciones políticas y de caridad; regalos y viáticos, para el efecto de que todos estas figuras no sean una forma de ocultar o promover actos de corrupción;
  • la prohibición de los “gastos de facilitación” conocidas coloquialmente como “mordidas”, tendientes a facilitar trámites o procedimientos y evitar costos o tiempos mayores u obstáculos naturales o artifi ciales;
  • la necesidad de implementar políticas corporativas y capacitación para el personal de la empresa en materia de combate a la corrupción;
  • principios para el mantenimiento adecuado de expedientes financieros y de auditoría, que permitan verificar la transparencia de las operaciones celebradas por las empresas, y
  • las medidas para asegurar que los órganos directivos de las compañías asuman las responsabilidades necesarias por incumplimiento o violación a las reglas de conducta.

En este rubro también se incorpora la cláusula anticorrupción, proyecto de ICC México que se explica más adelante.

Motivos para combatir la corrupción

Es innegable que la corrupción es un mal que como un cáncer va tomando formas desmedidas si no se acota. En este sentido, un acto mínimo de corrupción puede tener consecuencias directas e indirectas: algunas de las consecuencias directas son las violaciones a la ley que pueden llegar a tener efectos tales como prisión y sanciones económicas, pero más allá de esto, las consecuencias indirectas son el desprestigio y la merma gradual de lo único que puede salvar a una corporación en cualquier momento difícil, sin importar sus condiciones económicas, su reputación.

Todos conocemos casos de agrupaciones que por su indebida actuación fueron sancionadas, quebraron o hasta lograron burlarse de sus acreedores, y que al final salieron aparentemente airosas; sin embargo, a la fecha son conocidas como fraudulentas (así como sus accionistas y directivos), y que no son sujetos de la más mínima confianza.

En cambio existen empresas reconocidas por su prestigio que se mantienen en el mercado por años, conservando a sus clientes de siempre, ganando otros nuevos y siendo reconocidas por lo que son.

Ello implica que el adecuado comportamiento, es un buen negocio.

Es por eso que se debe combatir la corrupción: por la propia conveniencia de la compañía y del mercado en el que actúa, y asimismo que la empresa tiene la responsabilidad no solamente de actuar adecuadamente tanto hacia afuera (en sus relaciones con el sector público y privado) como hacia dentro, sino que tiene la obligación de promover las prácticas que combatan y eliminen la corrupción para generar mercados públicos y privados sanos y verdaderamente competitivos.

Acciones para evitar la corrupción

Actualmente existen en México diversas herramientas para que las empresas comiencen a familiarizarse e implementar medidas anticorrupción. Algunas han sido elaboradas por el sector público, y otras de gran trascendencia han sido meditadas y promovidas por el sector privado. Dos de estas herramientas merecen nuestra atención por su sencillez, las cuales se sugiere sean estudiadas y en su caso aplicadas en su negocio, para fortalecer la cruzada en contra de la corrupción que a todos nos interesa tanto en el presente como en el futuro:

  • la Secretaría de la Función Pública emitió un manual denominado “Herramientas de integridad para fortalecer la competitividad de las empresas”, que trata temas tales como:
    • la integridad y competitividad en las empresas;
    • las tendencias globales que crean integridad;
    • los compromisos de México con la transparencia y su impacto en las corporaciones;
    • la integridad como factor de competitividad y atracción de inversión, y
    • acciones concretas para convertirse o ser una empresa transparente por medio de una política de integridad. Este manual es una interesante introducción para las empresas que deseen incluir una política de integridad y combate a la corrupción dentro de su organización. Una copia puede obtenerse en la Unidad de Vinculación para la Transparencia de esta dependencia, o en la dirección de Internet www.funcionpublica.gob.mx;
  • la ICC México (www.iccmex.org.mx) cuenta a nivel mundial con unas Reglas de Conducta para combatir la extorsión y el Cohecho mismas que las corporaciones pueden implementar como lineamientos de autorregulación dentro de sus políticas de integridad. Asimismo, ICC México cuenta con un Comité Anticorrupción de donde nació la iniciativa, actualmente en difusión e implementación denominada:“La Cláusula anticorrupción: la cultura comienza en casa” en la que se está promoviendo que las empresas de todos tamaños y giros, incluyan la siguiente cláusula en sus contratos: “Las partes manifi estan que durante las negociaciones y para la celebración del presente contrato se han conducido con apego a las Reglas de Conducta para combatir la extorsión y el soborno publicadas por la Cámara de Comercio Internacional (Las Reglas) y que se comprometen a actuar conforme a las mismas durante la ejecución del mismo hacia sus contrapartes y hacia terceros. Las partes aceptan expresamente que, la violación a estas declaraciones o a “Las Reglas” implica un incumplimiento sustancial del presente contrato”.

El proyecto ha sido bien recibido por las organizaciones empresariales, grupos de compañías y personas físicas, quienes están empezando a incluir en sus contratos la cláusula anticorrupción, ya que sus benefi cios son infinitos, al promover una cultura de transparencia a todos los niveles comerciales hacia las partes y terceros. Tanto las Reglas como el uso de la cláusula no tienen costo alguno en ningún momento o fase de su implementación y son herramientas sumamente útiles para comenzar el proceso de combate a la corrupción. (Puede obtener tanto las Reglas como información de cómo implementar la cláusula anticorrupción en su empresa escribiendo a Rafael Orozco —ICC México—: rorozco@iccmex.org.mx, o al autor del presente artículo: rhernandez@comad.com.mx, en su calidad de Presidente del Comité Anticorrupción de ICC México).

Corolario

En la medida en que todas las compañías hagan el esfuerzo y tomen las medidas concretas para evitar la corrupción, lograrán mercados sanos que efectivamente permitan resultados con base en la eficiencia, calidad y costo, y no en relaciones malsanas e irregulares. Ello permitirá que las medianas y pequeñas empresas puedan tener mayores oportunidades.

El proceso no es fácil ni rápido, pero los efectos a mediano y largo plazo permitirán tener beneficios infinitos a las empresas, a la sociedad y al país que tanto lo requiere, para promover ambientes de negocios transparentes y eficientes.