La empresa tiene su domicilio en el estado de Puebla, pero para facilidad de los accionistas en un futuro las asambleas se realizarán en una oficina recientemente abierta en la ciudad de México. ¿Qué consecuencias legales traería esto?
En cumplimiento del artículo 179 de la LGSM las asambleas generales ordinarias y extraordinarias de accionistas deberán efectuarse en el domicilio social de la sociedad, ya que sin este requisito serán nulas, salvo caso fortuito o fuerza mayor. Este criterio está confirmado por los tribunales en la tesis: DOMICILIO SOCIAL. LA CIUDAD EN QUE SE ESTABLECE, SEGÚN EL ACTA CONSTITUTIVA DE LA SOCIEDAD ANÓNIMA, NO COMPRENDE LA ZONA CONURBADA Y LAS ASAMBLEAS CELEBRADAS FUERA DE AQUÉLLA, SON NULAS., visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXIII, Tesis III.2o.C.110 C, febrero de 2006, pág. 1807. La intención del legislador al establecer dicho requisito, fue la de proteger los intereses de los socios, y por ello sancionó con nulidad las asambleas celebradas en domicilio diverso. Ello en virtud de que el dispositivo legal referido contiene un mandato imperativo, consistente en que las asambleas generales de accionistas deberán llevarse a cabo en el domicilio social, y por ende, la celebración de aquéllas en cualquier otro lugar, está afectada de nulidad absoluta.
Si se desea realizar las asambleas en la ciudad de México será necesario que previamente se realice una asamblea general extraordinaria que, en atención a lo que señala el artículo 182, fracción XI de la LGSM, acuerde modificar el domicilio social de la compañía, con ello evitará que alguno de los socios o terceros afectados impugnen de nulidad las asambleas celebradas.
En la práctica corporativa para cumplir con la formalidad prevista en la ley, sólo en el caso de que todos los accionistas estén presentes en la asamblea y externen su consentimiento, en el acta se asienta el domicilio social actual, aun cuando la asamblea se hubiere realizado en otra ciudad.
