Clima laboral y la motivación

El clima organizacional depende de la capacidad de adaptación de las personas a diferentes situaciones del ámbito laboral

.
 .  (Foto: IDC online)

Diversos especialistas  en materia de recursos humanos aseguran que el clima organizacional está estrechamente vinculado a la motivación o desmotivación de los trabajadores. Afirman que la imposibilidad del individuo de satisfacer necesidades superiores como las de pertenencia, autoestima y autorrealización produce desmotivación. Por ello el clima organizacional depende de la capacidad de adaptación o desadaptación de las personas a diferentes situaciones que se presentan en el ámbito laboral.

Este proceso de adaptación puede variar de un momento a otro, pero una vez que se logra produce principalmente tres beneficios en la salud mental de las personas, a saber:

  • sentirse bien:
  • consigo mismos, y
  • con respecto a los demás, y
  • ser capaces de enfrentar por sí mismas las exigencias de la vida

En lugares de trabajo con baja motivación, sentimientos de frustración, apatía, desinterés, incluso episodios de agresividad y disconformidad, inexorablemente el clima organizacional es malo, mientras que en aquéllos donde la motivación es alta, las relaciones interpersonales son satisfactorias, existe el interés, colaboración y compromiso con la tarea y la empresa.

Para explicar los factores que inciden en el clima organizacional se debe partir de las siguientes premisas:

  • los individuos tienen ciertos motivos o necesidades básicas que representan comportamientos potenciales, que sólo influyen en el comportamiento cuando son provocados
  • provocar o no estos comportamientos depende de la situación o del ambiente percibido por el individuo
  • los componentes del ambiente sirven para estimular o provocar determinados motivos
  • las variaciones en el ambiente que se percibe originarán algunos cambios en el patrón de la motivación provocada, y
  • cada clase de motivación se dirige a satisfacer un tipo de necesidad. El patrón de la motivación provocada determina el comportamiento; un cambio en ese patrón generará un cambio de comportamiento.

Sin duda, es importante tomar en cuenta que si deseamos contar con un equipo de trabajo proactivo, optimista y productivo, debemos conocer sus inquietudes, interactuar en entorno que los rodea, interesarnos en sus necesidades y ayudarlos en la medida de lo posible a resolverlas para con ello generar motivación.

Fuente: www.losrecursoshumanos.com