México se ha convertido en una “fábrica de pobres”, ya que el poder adquisitivo ha registrado una caída de 77.79% de 1987 a 2014, lo que significa que –con el salario mínimo- una familia sólo puede comprar 34% de los productos de la canasta básica, informó el diputado de Movimiento Ciudadano (MC), Ricardo Mejía Berdeja.
El secretario de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), a través de un punto de acuerdo, destacó la necesidad de que el secretario de Economía (SE), Ildefonso Guajardo Villarreal, promueva acciones precautorias que eviten incrementos indebidos en los precios finales de los artículos que conforman dicha canasta.
En un comunicado, el legislador también llamó a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que intensifique la vigilancia a los comercios, “a fin de que se respeten los precios máximos autorizados”.
Refirió que una canasta de 40 productos recomendables para la alimentación, elaborada por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, registró un valor de 195.3 pesos en supermercados; en mercados públicos de 186.3 pesos, y en tianguis o mercados sobre ruedas de 172.4 pesos.
Sin embargo, el salario mínimo vigente de 67.29 pesos diarios no alcanza para adquirir alimentos nutricionalmente recomendados; para lograrlo, dijo, aquel tendría que ser de 184.96 pesos, es decir, debería aumentar 117.67 pesos al día.
Mejía Berdeja explicó que, pese al incremento del salario mínimo a fines del año pasado, “las posibilidades adquisitivas con esa cantidad son casi nulas, pues el aumento inflacionario se encuentra en 59.41 pesos”, precisó.
Además, con 67.29 pesos al día apenas se pueden comprar dos boletos del metro en el Distrito Federal, un kilo de tortilla y dos de azúcar, un litro de leche y una lata de atún.
El legislador consideró que los trabajadores compran cada vez menos, debido a la política pública para contener y regular los salarios, en esta situación se encuentran 10 millones 349 mil trabajadores cuyas percepciones no rebasan los dos salarios mínimos al día, por lo que “no tienen acceso a alimentos de calidad”.
De hecho, al cierre del primer cuatrimestre de este año, “un salario mínimo permitía comprar 5.3 kilos de tortilla, nivel que prácticamente no ha cambiado desde 2007, pero sí es el más bajo desde 1984, cuando las familias podían adquirir casi 32 kilogramos” de ese producto por la misma cantidad de dinero.
