Persisten niveles de desigualdad laboral

El Inegi reveló que las mujeres reciben un trato nocivo en la remuneración, actividades de desempeño, y jerarquización organizacional

México (Notimex).- Las mexicanas incrementaron su incorporación al mercado laboral en los últimos años; sin embargo, continúan enfrentando condiciones de desigualdad respecto al nivel de ingresos, jerarquía y toma de decisiones.

Si bien la participación económica de los hombres se redujo del 79.8 % en 2005 a 77.9 % en 2015, y la de las mujeres tuvo un alza en su nivel de 40.6% a 43.1%, esto no representó un beneficio en materia de equidad; ya que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) ocho de cada 10 hombres son económicamente activos; mientras que solo cuatro de cada 10 mujeres laboran.

En ese sentido, la población fémina con mayor nivel de estudios (medio superior y superior) son las más requeridas para ocupar un puesto (36.3%); no obstante, los varones con menor instrucción (primaria incompleta y completa) representan un mayor porcentaje de ocupación que un hombre con preparación académica.

Remuneraciones ¿iguales?

Los ingresos de las mujeres son menores en comparación con los hombres de acuerdo con un estido elaborado por el INEGI. En concreto el 7.1% de los varones recibe ingresos mayores a los cinco salarios mínimos al mes y las féminas obtienen el 4.5%.

Asimismo, el 40.9% de los hombres y 55.8% de las mujeres ocupadas reciben mensualmente ingresos que no rebasan los dos salarios mínimos

Jerarquía o posicionamiento

En la última década el 67.2% de las mujeres son subordinas y remuneradas, además de que el 22.6% trabaja por su cuenta, pero el 8% no reciben pago; y el 2.2% son empleadoras de medios de producción.

Por su parte, el 68.3% de los hombres ocupados se encuentra ubicado como subordinado y remunerado; 22.4% como trabajadores independientes; 5.4 % empleadores y 3.9 % trabajadores sin pago

En el sector servicios, la distribución es casi equivalente con 22% de varones y 20.4% de féminas.

En las instituciones y dependencias de la Administración Pública Federal se encuentra “altamente masculinizada”; pues el los hombres abarcan el 73.1% en las direcciones generales adjuntas o titulares de la entidad, 77.8% en las secretarías de Estado y 88.4% en las subsecretarías de Estado.

En conclusión, los datos revelados denotan la desigualdad a favor de los hombres en la posición de empleadores con más de 3.2% encima de las féminas. Además las mujeres trabajadoras que no reciben pagos son 4.1% más que las del sexo opuesto.

En el sector agropecuario y de construcción los varones abarcan el 12.1% y las mujeres ocupan el 1.4%; en la industria manufacturera los hombres representan 10.2 % y las mujeres 5.8 %.