Competencias laborales más solicitadas a millennials y centennials
En tres años la fuerza laboral estará compuesta en un 50% por estas generaciones
Laboral
En los años próximos la fuerza laboral continuará registrando cambios que se irán adaptando a las necesidades y aptitudes de las nuevas generaciones, por lo que las empresas ya no solo se enfocarán en talentos con aptitudes técnicas, sino también con habilidades blandas que nutran la visión de los centros de trabajo y donde los millennials y centennials serán clave.
Y es que los millennials, que son personas ubicadas entre los 29 y 41 años, así como los centennials, jóvenes de entre 18 y 28 años, son quienes han ayudado a las compañías a flexibilizarse y gracias a su conocimiento digital, han tenido un impacto positivo en el mundo de los negocios, por lo que serán el principal interés de las organizaciones.
De acuerdo con Gabriela Rodríguez, Directora Regional para Latinoamérica de evaluar.com -plataforma especializada en reclutar talento con tecnología e inteligencia artificial-, las nuevas generaciones son las que “redefinen el mercado laboral”, por lo que las compañías necesitan invertir “en la formación y desarrollo de sus colaboradores más jóvenes”, para atender las exigencias del futuro.
Si bien, tanto millennials como centennials son generaciones caracterizadas por sus competencias digitales, al reclutar talento las empresas centrarán su atención en el desarrollo de habilidades que permitan a los colaboradores liderar entornos de negocio cambiantes y evolutivos, por ello, buscarán entre los candidatos aptitudes como:
- inteligencia emocional
- optimismo
- resiliencia
- apertura y flexibilidad al cambio
- liderazgo facilitador
- orientación al cliente
- integridad
- comunicación efectiva
- orientación al logro
- trabajo en equipo
Pero, ¿por es importante que los millennials y centennials desarrollen estas habilidades?, de acuerdo con evaluar.com, en 2025 estas generaciones representarán más del 50% de la fuerza laboral, por lo que las empresas necesitan poner más atención en dichas competencias que en algunos casos, se desarrollan de forma innata, pero en otras, a través de la formación y experiencias laborales que pueden identificarse con evaluaciones a los equipos de trabajo para así, diseñar estrategias que permitan potencializarlas.