En labores donde los subordinados desarrollan más actividades intelectuales que físicas, por utilizar el teclado de una computadora, una máquina registradora o maquinaria pequeña, se reportan frecuentemente malestares relacionados con el uso incorrecto del mobiliario y útiles de oficina que les son asignados (sillas, mesas, teclados, etcétera); por ejemplo la disminución de la circulación sanguínea en las piernas y consecuentemente su hinchazón o músculos estáticos que acumulan estrés (espalda, cuello, y hombros), lo que provoca dolores intensos.
Estos malestares, en muchas ocasiones pueden disminuirse o eliminarse con la implementación de mobiliario y equipo ergonómico, pero también incide el hecho de que los trabajadores los utilicen adecuadamente, es decir, ajustar bien su silla o apoyar mejor su teclado, etcétera.
Por ello es recomendable que el área de recursos humanos les recuerde a los trabajadores que deben:
- variar su postura a lo largo de la jornada, a fin de reducir el estatismo postural;
- evitar:
- giros e inclinaciones frontales o laterales al tronco. La posición ideal es que esté inclinado hacia tras en relación con el asiento a unos 110º ó 120º a efecto de que su actividad muscular y presión en las vértebras sea menor, e
- inclinaciones de la cabeza a no más de 20º, así como giros frecuentes;
- guardar los brazos con debida proximidad a su tronco y donde el ángulo del codo no debe ser mayor a 90º, en tanto que las muñecas no deben inclinarse a más de 20º;
- mantener los muslos horizontales con los pies bien apoyados en el suelo, y
- apoyar los antebrazos en el escritorio y las manos en el teclado.