Hoy en día muchas empresas mexicanas optan por dar capacitación a sus colaboradores por medios remotos, es decir, vía Internet denominada e-learning, que consiste en la capacitación y adiestramiento de empleados usando materiales disponibles para Web, llegando a ofrecer sofisticadas facilidades como flujo de audio y video, presentaciones en PowerPoint, vínculos a información relativa al tema publicado en la red, animación, libros electrónicos y aplicaciones para la generación y edición de imágenes.
Según un reporte de la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos publicado recientemente en el periódico el Economista, en relación con una encuesta similar realizada en el 2004, actualmente este tipo de capacitación se ha incrementado en un 9%, ya que principalmente empresas del sector financiero han invertido o destinado sus recursos para el desarrollo del e-learning, porque han descubierto que sus colaboradores se capacitan de acuerdo con el ritmo de sus actividades.
Esta tecnología también la han aprovechado los altos ejecutivos quienes en lugar de realizar sus estudios en universidades del extranjero lo hacen en Internet; pero esto no sucede en todos los niveles, porque esta nueva forma de capacitación ha aumentado sólo en un 1.3% para los trabajadores sindicalizados.
De ahí que resulte recomendable invertir en esta nueva herramienta para que la capacitación sea aprovechada por los trabajadores de primera mano y reflejada en la empresa a la postre, ya que reporta muchas ventajas, a saber:
- mayor productividad, dado que permite a los trabajadores estudiar desde su propio escritorio, así como eliminar costos de viajes;
- entrega oportuna, durante la puesta en marcha de la capacitación por e-learning puede proveer entrenamiento simultáneo a muchos participantes acerca de los procesos y aplicaciones del producto;
- capacitación flexible, es factible que los participantes lleguen a escoger su propia forma de aprender y tengan a la mano algunas fuentes de información como referencia, facilitando de este modo el proceso de cambio en el desarrollo de sus funciones, y
- ahorros en los costos por participante, porque la erogación total individual de la capacitación es posible sea menor que en un sistema tradicional guiado por un instructor, salvo que éste sea diseñado a la medida de quien lo toma.