Los datos difundidos agregaron más evidencia de que el declive inmobiliario y la crisis del crédito podrían haber empujado a la economía estadounidense a una recesión.
El Departamento de Trabajo reportó que las nóminas no agrícolas de marzo disminuyeron en 80,000, el mayor declive en cinco años.
Algo que empeoró el débil cuadro, fue que el departamento revisó las pérdidas de empleos de los dos primeros meses del año a un total de 152,000 desde una estimación anterior de 85,000.
La tasa de desempleo de marzo subió a 5.1% desde el 4.8, para ubicarse en el máximo desde una tasa similar en septiembre del 2005.
El reporte del empleo de marzo fue peor de lo previsto. Los economistas encuestados antes del informe proyectaban una reducción de 60,000 en las nóminas no agrícolas y un alza de la tasa de desempleo al 5%.
Los títulos públicos de Estados Unidos subían tras los números débiles, porque los mercados financieros anticipaban una mayor probabilidad de nuevas rebajas de tasas de interés de la Reserva Federal. El dólar y los futuros de las acciones caían.
"No parece haber ninguna luz al final del túnel. Muestra que estamos en medio de una recesión, que probablemente durará algún tiempo", dijo Carl Lantz, un estratega financiero de Credit Suisse en Nueva York.
"Nuestra expectativa es que será una recesión más larga que las últimas dos y sólo estamos en el comienzo", añadió Lantz.
Durante el primer trimestre del año en curso, las pérdidas de empleos promediaron 77,000 por mes, comparado con un aumento promedio mensual del empleo de 76,000 en el segundo semestre del 2007, según Keith Hall, comisario de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Las pérdidas de empleos fueron generalizadas en marzo y las mayores se produjeron en la construcción y la manufactura. El empleo fabril bajó en 48,000, el mayor declive desde julio del 2003.
Sobre el número de las nóminas, T.J. Marta, estratega de renta fija de Royal Bank of Canada Capital Markets de Nueva York, sostuvo que "es una cifra muy pobre, no sólo con una sorpresiva caída en marzo sino también con las revisiones a la baja de las cifras previas".
"Si se miran las solicitudes iniciales (de subsidio de desempleo), las solicitudes continuas y las nóminas no agrícolas, todas apuntan a niveles similares de lo que teníamos a principios o durante la recesión del 2001. Es difícil decir que no estemos en recesión", señaló.
Fuente: CNN Expansión
