Aon Intergama, prestigiada firma de consultoría a nivel internacional, durante la Segunda Cumbre de Compensaciones celebrada a finales del año pasado, presentó los puntos a considerar para la identificación y retención del talento, para llevar a la empresa a altos niveles de productividad.
La firma sostiene que para identificar al personal con talento es necesario conocer sus características, las cuales se agrupan en cuatro temas básicos:
- relación con otros, el cual abarca conceptos como armonía, comunicación, empatía, inclusión, individualización, relación y responsabilidad; en este rubro el talento: crea desarrolla y conserva relaciones de forma afectiva;
- impacto, contiene conceptos como carisma, competitividad, desarrollo, excelencia, mando y positivismo, el talento: logra motivar a los demás;
- esfuerzo, comprende la auto confianza, creencia, disciplina, enfoque, flexibilidad, significación, ser emprendedor, iniciador, restaurador. En este caso, el talento: conlleva a tener una actitud en pos de los resultados, y
- pensamiento, incluye análisis, conexión contexto, equidad, estrategia, estudio, futurismo (visionario), organización, prudencia, intelecto, poder idear, ser inquisitivo; el talento: logra reunir información e imágenes mentales y luego tomar decisiones.
Una vez identificado el personal con talento dentro o fuera de la negociación como posible contratación, es necesario crear estrategias para retenerlo, pues actualmente los trabajadores se comportan como dueños de un valioso capital, el cual lo entregan cuidadosamente y demandan un valor a cambio de su contribución.
Los trabajadores con talento son "inversionistas" que buscan obtener un retorno sobre su inversión convirtiéndose en agentes libres que deciden cuándo, cómo y con quién invertir; su fidelidad y compromiso se gana generando valor para su inversión.
Por lo anterior, Aon Intergama recomienda establecer muy claramente las funciones del puesto al encontrarse íntimamente ligadas con la satisfacción dada por los elementos propios del trabajo; crear programas que generen oportunidades de desarrollo, reconocer y compensar el mérito y establecer beneficios no monetarios al desempeño.
Concluye que para lograr que la administración de talento resulte benéfica para la empresa es necesario definir la misión de la compañía y establecer los requerimientos del talento, evaluarlos, y recompensarlos.