Es conocida la relación existente entre el comportamiento ético de las empresas y la confiabilidad que tal comportamiento genera en las relaciones comerciales con sus clientes, por ello es imperativo que los directivos tomen medidas para establecer, mantener y mejorar la imagen de respeto a los valores éticos con los que opera la organización, tales como:
- desarrollar un código de ética y darlo a conocer en la organización, así como establecer mesas de discusión sobre el mismo y los temas que abarca;
- realizar auditorías no programadas para determinar las áreas vulnerables a conductas inmorales o ilícitas de los trabajadores;
- comunicar a los empleados, lo aceptable e inaceptable en cuanto a prácticas de negocios;
- proporcionar a los empleados métodos para resolver problemas éticos;
- evaluar el desempeño de los trabajadores, en donde la conducta ética juegue un papel importante;
- aplicar planes y programas de incentivos y desempeño actualizados donde se enfatice el desempeño general;
- diseñar un programa de recompensas, enfocado a premiar y reconocer la conducta ética, y
- efectuar acciones definitivas cuando ocurran conductas negativas en la organización, actuar con decisión comunicando a los demás empleados cual fue el acto sancionado y cuáles las consecuencias del mismo.