¿Se pueden crear artistas falsos?

La llegada de Internet ha facilitado que personas de todos los rincones del mundo tengan acceso a música en cuestión de segundos, lo que ha originado a su vez que la compra de esta en formato físico disminuya considerablemente.

Es un hecho innegable que se generan más ingresos por la música distribuida digitalmente, como lo hacen Spotify, Youtube, Apple Music, etc. Las ventajas que representa esta difusión electrónica ha llevado a que ciertos individuos con el objetivo de conseguir mayores beneficios, emplee métodos cuestionables para ello.

Un informe de Music Business Worldwide, asevera que Spotify lleva mucho tiempo creando artistas falsos para incluirlos en listas musicales (playlists) famosas para enriquecerse. Desde el año pasado ya algunos usuarios habían detectado esta polémica estrategia, la cual la empresa ha negado categóricamente.

Es una mala señal que la plataforma de música en streaming se dedique a crear artistas en lugar de promocionar a aquellos que confían en su negocio. De constatarse esta situación varias compañías discográficas y artistas independientes se plantearan, y ya lo han hecho, seguir trabajando con el gigante de la música digital.

Sin embargo, no es tan sencillo identificar a los artistas falsos. El informe explica que en 2016 un productor musical en Europa, declaró que tenía un acuerdo con Spotify para crear música que sería distribuida por medio de artistas falsos.

Las canciones se habrían incluido en playlists con muchos seguidores como Peaceful Piano, Piano in the Background, Deep Focus, Sleep, Ambient Chill y Music for Concentration. Con esta táctica se obtienen inmediatamente muchas reproducciones y por ende, mayores beneficios.

No existe un mecanismo oficial para conocer si un artista de Spotify es real o ficticio; no obstante, existen indicios para detectar puntos extraños, como que superan las 500 mil reproducciones y al mismo tiempo no tienen cuenta en Facebook, Twitter, ReverbNation, SoundCloud, tampoco parece que tengan un representante o algún sello discográfico, y Spotify tiene los derechos de esas canciones y con ello no aparecen en Youtube o en alguna otra plataforma.

De verificarse la existencia de estos casos, sería un duro golpe para la plataforma en cuanto a su credibilidad porque esta paga por reproducción, y con estos denominados artistas falsos el dinero se queda en casa, hecho que la alejaría de lo que siempre ha sustentado que en primer lugar, apoya a los artistas y no obtener un lucro de ello.

Sin embargo, por otra parte, la empresa puede hacer esto por medios legales porque puede celebrar contratos en donde ellos consiguen los derechos y los artistas utilicen pseudónimos para no revelar su verdadera identidad. Acciones que se han presentado en esta industria y en otras más durante toda la historia, ya que siempre han existido artistas que no usan su nombre real y también ceden los derechos de sus obras porque eso les representa un beneficio.