A pesar de que especialistas coinciden en que se tiene que revisar y, si es posible, mejorar la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios (LDFEFM), creada en el 2016, ésta reflejó resultados positivos en el endeudamiento estatal en los años 2017 y 2018.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el saldo de la deuda de estados y municipios registró una caída anual de 3.7%, en términos reales, mientras al cierre del año pasado la disminución fue de 1.3%; lo anterior implica, en general, una mejora en las finanzas públicas subnacionales, así como la interpretación de que la regulación implementada exhibió efectos positivos en la sostenibilidad de la deuda.
Kristobal Meléndez Aguilar, analista del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), detalló que esta medida presentó un efecto positivo para evitar que el nivel de endeudamiento empezara a aumentar, “porque se ponen medidas de presupuesto sostenible, ahora la deuda debe estar respaldada por algún ingreso, y ha tenido resultados positivos porque antes se podía adquirir deuda de manera indiscriminada, y con la LDFEFM frenó este tipo de prácticas de los gobiernos estatales”.
Sin embargo, puntualizó que debe haber un control más estricto en la forma de contratación de deuda, en especial las garantías de pago que aplican y las estrategias para adquirir financiamientos sin ser necesariamente deuda.
“Si dejan en garantía las participaciones, el gobierno federal puede tener una observación en el nivel de endeudamiento, pero en el caso de los estados, al ser libres y soberanos, empiezan a endeudarse con recaudación local, de tal forma que el gobierno federal no puede hacer una observación de sus ingresos, y no tendría un derecho de impedir una mayor adquisición de deuda”, destacó.
Héctor Magaña Rodríguez, director del Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, explicó que, ante un importante crecimiento de deuda y falta de impacto en la tasa de crecimiento económico, la LDFEFM “puso más control a la deuda, por lo cual, diferentes entidades tuvieron que optar por otro tipo de financiamiento para hacer frente a sus necesidades”.
“La ley no exige una rendición de cuentas, la deuda debe tener un fin específico para el crecimiento económico de la entidad; sin embargo, no especifica una consecuencia severa para las entidades que no cumplan con ello”, sostuvo.
José Luis de la Cruz Gallegos, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic), comentó que hay dos factores que permiten la disminución de la deuda estatal, “el primero es la LDFEFM, que sí representó un marco que restringió la libertad que los estados tenían para endeudarse y que reguló a aquellos que hicieron uso de este instrumento”.
“El segundo factor es el hecho de que se tengan indicadores públicos y que se le dé más seguimiento, de alguna forma, evitó que los gobiernos estatales siguieran endeudándose, ya que permitió la evaluación y seguimiento de la deuda”, expuso.
Se permite la adquisición de deuda para diferentes condiciones, como refinanciamiento, que resulta al adquirir los recursos para pagar deuda anterior; también para financiar inversión pública, que sí implica un crecimiento del nivel de deuda, pero debe tener un beneficio para la sociedad, pronunció Meléndez Aguilar.
Casos particulares
En el 2018, 21 estados disminuyeron su deuda pública, en comparación con el cierre del 2017, destacando Querétaro (32.5% real), Baja California Sur (16.4%) y Yucatán (15.9%); al otro extremo, la entidad que registró el mayor aumento fue Campeche (80.1 por ciento).
“En los estados en los que tienen un crecimiento económico importante, su nivel de endeudamiento tiende a ser menor”, afirmó Héctor Magaña.
El analista del CIEP planteó que “la tasa de interés está aumentando a niveles muy altos, y las entidades federativas que tienen un nivel de deuda bajo se pueden dar el lujo de disminuir su nivel de endeudamiento para evitar pagar altos intereses”.
“En el caso de Campeche, la deuda se obtuvo para buscar otras alternativas, ya que su actividad económica principal estuvo muy mermada, y con estos nuevos recursos que obtuvo a través de la deuda, trataron de estabilizar las actividades relacionadas al petróleo y de apoyar otras actividades y compensar la baja en la productividad de los energéticos”, refirió el director del CIEN.
En el caso de Tabasco, el director del Idic dijo que el estado está dejando de endeudarse, además de que ostenta programas de apoyo y desarrollo del sexenio federal pasado —más los proyectos del actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador, como el Tren Maya y las refinerías— para incrementar su nivel económico, el cual se encuentra en fase recesiva.
Sólo Bajío y Occidente disminuyen obligaciones financieras
Bajío y Occidente fueron las únicas regiones del país que registraron disminuciones en la deuda pública subnacional durante el sexenio anterior. También fueron las demarcaciones con el mayor dinamismo económico en el periodo referido.
Es decir, estas regiones, con algunas excepciones estatales, aprovecharon la detonación de su actividad económica —lo cual incrementa los ingresos locales y federales— para sanar sus finanzas públicas.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el saldo de la deuda de estados y municipios del Bajío pasó de 17,729 millones de pesos al cierre del 2012 a 14,794 millones al finalizar el año pasado, lo que significó, en términos reales, una caída de 34.2%; las cuatro entidades federativas de esta zona presentaron descensos en sus obligaciones financieras —Guanajuato, San Luis Potosí, Querétaro y Aguascalientes.
En Occidente, durante el lapso de análisis, la deuda transitó de 50,002 millones a 59,394 millones de pesos, que al considerar los niveles inflacionarios resulta un descenso de 6.4%; de los integrantes de esta región, mostraron reducciones Jalisco y Nayarit, mientras que los incrementos del indicador fueron en Michoacán y Colima.
La teoría indica que, en los estados en que se exhibe un crecimiento económico importante, su nivel de endeudamiento tiende a ser menor. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, las regiones con los mayores incrementos de la actividad económica en la administración federal pasada fueron Bajío (4.6% como promedio de las variaciones anuales) y Occidente (3.4 por ciento).
Congreso local aprueba endeudamiento para obras de infraestructura
Jalisco contratará crédito por $5,250 millones
Guadalajara, Jal. Con el voto en contra de los diputados de Morena y del panista José de Jesús Hurtado, el Congreso de Jalisco aprobó la contratación de un crédito por 5,250 millones de pesos para inversión pública productiva.
Debido a que el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 no asignó recursos a los “proyectos estratégicos” de infraestructura que requiere Jalisco, el Ejecutivo estatal solicitó al Congreso la aprobación del endeudamiento a fin de ejecutar las obras que requiere el estado.
El crédito, que previamente había sido aprobado por la Comisión de Hacienda y Presupuesto, sufrió dos modificaciones respecto a la iniciativa original enviada al Poder Legislativo por parte del gobernador Enrique Alfaro Ramírez.
Se redujeron 100 millones de pesos al presupuesto que se destinará a la Red Jalisco para dotar de internet a poblaciones carentes de este servicio, por lo que pasó de 1,000 a 900 millones, mientras que la construcción y mantenimiento de 19 tramos carreteros contarán con un recurso que subió de 2,000 a 2,100 millones de pesos.
El resto del crédito se destinará al proyecto del Sistema Integrado de Transporte Colectivo Peribús, mismo que contará con 1,200 millones de pesos que se ejercerán en pavimentar con concreto hidráulico el periférico.
Otros 800 millones de pesos se emplearán en la construcción de plantas de tratamiento de aguas residuales y los corredores de movilidad inteligente en el área metropolitana de Guadalajara.
Los diputados también aprobaron renegociar los otros 32 créditos que actualmente están vigentes y que, en conjunto, conforman la deuda pública estatal.