Fideicomisos, ¿propician el lavado de dinero?
GAFI publicó una guía para abordar el enfoque basado en riesgo en los servicios fiduciarios
Corporativo
El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) alertó del riesgo que tienen los proveedores de servicios fiduciarios para que los fideicomisos sean utilizados para disfrazar u ocultar la propiedad de activos ilícitos por medio de estos instrumentos legales.
En este contexto, el organismo publicó hace unos días una guía para abordar el enfoque basado en riesgo en los servicios fiduciarios dirigida a proveedores de servicios, gobiernos y autoridades competentes, con el fin de diseñar medidas efectivas para la administración del riesgo en este tipo de instrumentos legales por los cuales se pueden trasmitir bienes, recursos monetarios y derechos, entre otras acciones.
“Los delincuentes pueden solicitar los servicios de proveedores fiduciarios para ayudarlos a retener el control de los ingresos de sus delitos, mientras disfrazan el origen y la propiedad de estos activos. A través de la creación de compañías ficticias o fideicomisos, pueden ocultar su propiedad y crear una apariencia de legitimidad”, destaca el GAFI en el documento.
Dentro de la guía del GAFI, que tiene el carácter no vinculante para sus países miembro, se explican las medidas que se pudieran aplicar para implementar el enfoque basado en riesgo, que es una de las recomendaciones de este organismo intergubernamental, que es el referente mundial para establecer los estándares relacionados con la prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo.
El enfoque basado en riesgo se refiere a las acciones que gobiernos, autoridades y sujetos obligados, entre ellos los proveedores de servicios fiduciarios, deben tomar para identificar, evaluar y comprender el riesgo de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo al que están expuestos, con el fin de mitigarlo y gestionarlo de manera eficiente.
“Para los proveedores de servicios fiduciarios, identificar y mantener una comprensión del riesgo de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo que enfrenta el sector (...)requerirá la inversión de recursos y capacitación. Para los supervisores, esto también requerirá mantener una comprensión de los riesgos específicos de su área de supervisión”, se puede leer en la guía del GAFI.
El organismo recomienda que todos los proveedores de servicios deban tomar medidas para identificar y evaluar el riesgo con base en su universo de clientes. Esto se puede hacer con el apoyo de las evaluaciones nacionales de riesgo de cada país, los informes sectoriales, así como en artículos de prensa.
En la guía, el organismo destaca que los sistemas automatizados de las instituciones para el monitoreo de las transacciones pudieran no ser apropiados para evaluar los riesgos que representa cada cliente, por lo que es recomendable construir una relación profesional de largo plazo para tener un mayor conocimiento transaccional sobre la persona a la que se le da el servicio.
Fideicomisos en México
En México, los proveedores de servicios fiduciarios son las instituciones financieras, mismas que están supervisadas en materia de prevención de lavado de dinero. Pese a esto, el GAFI ha señalado que existe un riesgo sobre el uso indebido de estos instrumentos para blanquear recursos.
“Generalmente (los fideicomisos) son utilizados por extranjeros para comprar bienes e invertir en México (...) Las autoridades consideran que este riesgo está atenuado debido al hecho de que solamente las instituciones financieras reguladas pueden funcionar como fiduciarios y están obligadas a identificar las diferentes partes del fideicomiso”, se puede leer en los resultados de la última evaluación que el GAFI realizó a México.
El organismo señala que, si bien las instituciones financieras están obligadas a identificar las partes de un fideicomiso, si una de éstas es una persona jurídica (una empresa), no se va más allá para detectar al beneficiario final. “Ha habido algunos casos donde los fideicomisos fueron utilizados para invertir fondos ilícitos”.
Entre el 2017 y el 2018, del total de bancos en México, 36 ofrecían servicios de fideicomisos, los cuales administraban bajo estos instrumentos activos de 7 billones de pesos.
El GAFI indicó que, si bien las autoridades competentes en México tienen acceso oportuno a un registro central de los fideicomisos, es recomendable que también accedan a mayor información sobre el beneficiario final de estos instrumentos.
El organismo destaca en su guía que, aunque existen algunos retos para que los proveedores de servicios fiduciarios en el mundo apliquen un enfoque basado en riesgo en fideicomisos.
*Con información de El Economista