En México la producción de pan asciende en promedio a un valor de 120,000 millones de pesos anuales, que generan por lo menos, 56,000 establecimientos expendedores de pan o panificadoras, de las cuales un 75% de ellas son informales.
En entrevista con Notimex, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora y Similares de México (Canaipa), Carlos Otegui Hernández, expuso lo anterior, tras señalar que la industria “enfrenta una situación compleja tanto por la informalidad, como por los precios del pan que tienen entre dos y tres años que se han mantenido sin aumentos, sin actualizarse”.
Otegui Hernandez reconoció que “el gran reto de la Industria, es la competencia desleal que se da a través de esos expendios de pan informales, contra los que una panadería establecida no puede competir”.
Detalló que las tiendas de pan “son negocios que no pagan muchísimas cosas, servicios, luz, agua, seguro social, no pagan impuestos de nómina. Esto explica las diferencias de los precios en el pan, pues al depender de la oferta y la demanda, al igual se puede encontrar un pan parecido de 4.50 pesos y otro de 7.50 pesos, y por ello, se prefiera el más barato”.
"Ellos no pagan muchísimas cosas como lo hace un negocio establecido”, reiteró. Tampoco dijo ofrecen la misma calidad, pues sus insumos no son los mejores, cuando las personas se alimentan con un producto que es de baja calidad, pues se presentan enfermedades como la obesidad, las cardiovasculares, de diabetes o muchísimas otras.
Sobre los precios y su posible aumento -otro de los problemas que enfrenta la industria- reconoció que nunca es bien recibido por el consumidor un incremento, “pero los negocios deben subsistir”.
“Las panaderías en general -dijo- llevan dos o tres años sin subir sus precios y esto obviamente es contraproducente porque puede venderse más, pero se pierde dinero”.
Señaló que en 2019 la industria creció en ventas en promedio 3%, sin embargo, considera que aún cuando ha habido crecimiento, se ha tenido que sacrificar mucho en utilidades porque “la industria del pan no ha tenido incrementos en los precios, y es un sector que se ha rezagado”.
Como Canaipa, comentó “no se puede hablar de subir los precios del pan; nosotros no podemos inducir a un aumento de precios” pero dijo: “a título personal, yo creo que se tienen que subir los precios porque ya la situación no da para más, la situación es muy compleja”.
Refirió que “todos los sectores actualizan sus precios cada año, sin embargo, los dos mil agremiados de la Canaipa en el país han mantenido sus precios para seguir compitiendo pero ya se requiere de un incremento”.
Citó que algunas empresas como Bimbo, que es integrante de la Cámara, al inicio de este año, ajustó sus precios en uno o dos pesos, “y esa es una decisión de las empresas, en su caso lo implementan cada año y mi sentir es que es correcto”.