¿Necesaria la seguridad privada?

Empresas de seguridad privada denuncian que dejaron de ser un complemento para tener que hacerse cargo de algunas necesidades que debería de satisfacer el Estado

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 .  (Foto: Valeria Torres)

Al entrar a una empresa, banco, escuela, hotel o cualquier otro lugar y la primer persona que se encuentra ahí, generalmente, es el guardia de seguridad perteneciente a una un servicio privado. Las empresas de seguridad privada en la actualidad aportan el 2% del PIB y aproximadamente emplean 600,000 personas.

Durante 2019 esta industria registró un crecimiento del 20%, es decir, 33% que la economía nacional.

Estos datos comprueban que estas organizaciones además de proteger a los ciudadanos aportan a la competitividad y desarrollo de nuestra economía, aseguró el coordinador general  de Asume, Armando Zúñiga.

Este auge responde, de acuerdo con la Agrupaciones de Seguridad en México (Asume), al ambiente de inseguridad que "impera en el país desde hace años".

Una industria con problemas

Al igual que los demás sectores productivos en México, la seguridad privada se enfrenta a obstáculos importantes como la informalidad y una regulación que no responde a sus necesidades ni contexto.

Datos de la misma Asume arrojaron que el 40% de quienes se dedican a esta actividad se encuentran en la informalidad, es decir, sin registros federales ni locales ni cumpliendo con sus obligaciones fiscales y patronales.

A su vez, el marco normativo que lo regula, aseguraron, es caduco en tanto no contempla ciberseguridad ni la aplicación de tecnología para la protección.

Por otro lado, destacaron que más que ser un complemento en los últimos tiempos se han convertido en un sustituto de las actividades del Estado en materia de protección de la ciudadanía. Ello ante un ambiente creciente de inseguridad y falta de justicia.