¿Periodista o algoritmo?

Un experimento demuestra los alcances de la inteligencia artificial

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 .  (Foto: iStock)


GPT-3 es el más reciente e importante modelo de inteligencia artificial de lenguaje de OpenAI (laboratorio de investigación norteamericano), el cual ofrece a los investigadores una versión beta.

Liam Porr, un investigador, solicitó una de ellas e inició una colaboración con un estudiante de doctorado de la Berkeley, elaboraron un guión y lo aportaron a GPT-3 el título y la introducción para una publicación de blog.

Se eligió productividad y autoayuda como categoría y a partir de ahí escribió varios titulares siguiendo a medios como Medium y Hacker News para ver contenido similar.

Dentro de los titulares que escribió están: “¿Te sientes improductivo? Quizás deberías dejar de pensar demasiado” o "La audacia y la creatividad triunfan sobre la inteligencia".

Después de dos semanas de publicaciones casi diarias, Porr retiró el proyecto con el mensaje final siguiente: “Lo que haría con GPT-3 si no tuviera ética”. El investigador deseaba demostrar que GPT-3 podía fingir ser un escritor humano.

Pese al patrón de escritura algo extraño del algoritmo y los errores ocasionales, solamente tres o cuatro individuos de entre todos los comentarios recibidos sospecharon que el texto había sido generado por un algoritmo.

El investigador afirma que la gente podría emplear la herramienta para generar una gran cantidad de contenido, el cual si bien podría considerarse mediocre, puede servir para recopilar información de otros medios como lo hace Toutiao en China, que es un sitio soportado completamente por inteligencia artificial y no por periodistas.