Criptomonedas pueden consumir menos energía que los actuales sistemas de pago
Las tarjetas físicas consumen más energía que las carteras digitales
Corporativo
Las criptomonedas suponen una gran diferencia en cuanto a su consumo de energía, respecto a los sistemas de pago actuales, señaló una investigación del Fondo Monetario Internacional (FMI), que agregó, es por ello que los bancos centrales deben considerar esta situación, pues las monedas digitales contribuyen a la lucha contra el cambio climático.
De acuerdo con el estudio, las CBDC y algunos tipos de criptoactivos pueden ser más eficientes desde el punto de vista energético; y tomando en cuenta que las criptodivisas se basan a menudo en libros de contabilidad para validar y registrar transacciones, la cantidad de energía que utilizan depende principalmente de dos factores:
- cómo los participantes de la red se ponen de acuerdo sobre los historiales de las transacciones: algunos criptoactivos utilizan un mecanismo de consenso de prueba de trabajo que necesita una potencia de cálculo considerable y energía para obtener el derecho a actualizar el historial de transacciones, otros utilizan enfoques diferentes
- el acceso a los sistemas de libro mayor distribuido: algunos carecen de permisos, lo que permite a cualquiera unirse y validar las transacciones, pero otros requieren permiso de una autoridad central, lo que ofrece un mayor control sobre aspectos clave del consumo de energía
No obstante, la investigación del FMI mostró que las criptomonedas de prueba de trabajo consumen mucha más energía que las tarjetas de crédito, y sustituir el proof-of-work por otros mecanismos de consenso y utilizar sistemas con permisos son saltos ecológicos, ya que su conjunto hace que su consumo de energía esté muy por debajo del de las tarjetas de crédito.
Lo cierto es que el uso total de energía varía según la tecnología, el tamaño de la cadena de pagos y otras características, por ello los bancos centrales estudian otras opciones que no incluyen libros de contabilidad distribuidos, lo que significa que las CBDC tienen el potencial de reducir las necesidades de energía para los pagos digitales mientras se hacen más eficientes.
Pero los CBDC aún están en sus inicios, por eso, los bancos centrales adoptarán nuevas tecnologías en las que su potencial de ahorro de energía dependerá del uso asociado a otras características de diseño que ayuden a la seguridad e integridad para facilitar el acceso universal.
El FM, señaló que los bancos están estudiando si los CBDC deben ser accesibles a través de tarjetas físicas, pues aunque consumen más energía que las carteras digitales, pueden ayudar a la adopción e inclusión, especialmente cuando la alfabetización digital o la conectividad de la red móvil son un problema.