Es una realidad, no puede haber sustentabilidad sin equidad de género y debido a esto las mujeres están liderando este cambio estructural, económico y empresarial en el país, señaló ILUNKA.
La firma explicó que el trasfondo social, económico y cultural nos cuenta que, para lograr la posición, derechos y liderazgo que algunas gozan, las mujeres han tenido que atravesar un largo camino lleno de retos, tabúes y falta de oportunidades para poder hacerse de más “sillas” en mesas directivas, que les permitan pavimentar el camino para las que vienen.
Asimismo, más allá de los datos, los cuales nos dicen que, contar con mujeres en posiciones de liderazgo y cargos administrativos aumenta en 15% la rentabilidad de las empresas, de acuerdo con la investigación Mujeres en las Empresas; Impulsoras del Cambio 2022 del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección, y que solo el 18% de estos puestos están ocupados por ellas, la realidad es que estas posiciones no se están abriendo para cumplir con una cuota social o un tema de “equilibrar la balanza” para conseguir inversión. Las mujeres están ganando terreno debido a su talento, mejores herramientas, oportunidades, derechos y una propuesta clave: tienen una forma diferente de liderar.
“Ya no podemos hablar de empresas sostenibles sin entender que para que esto sea posible, es necesario impulsar la equidad laboral y de género; y que las mujeres ya se están encargando de ello. Si bien este es un trabajo en conjunto que requiere de ambas partes, el posicionamiento que nosotras estamos tomando como líderes y pioneras en ESG y sostenibilidad no ha sido solo al azar, sino una manera de crear cambios reales y ampliar las oportunidades para las líderes del mañana”, de acuerdo con Adriana Pulido, CEO y fundadora de ILUNKA, agencia de planeación estratégica en ESG y sostenibilidad en México.
Entre los motivos por los que son las mujeres quienes se encuentran al frente de esta transformación empresarial, Pulido enlista los siguientes:
de acuerdo con el IPADE, las mujeres logran integrar de manera cohesiva sus equipos de trabajo, permitiéndoles trabajar en sincronía, motivados y por objetivos
la escucha empática ha sido una cualidad remarcable en las nuevas líderes, pues mediante equipos que gozan de comunicación bidireccional es posible llegar a mejores acuerdos y entendimientos
impulsar el conocimiento, crecimiento e innovación sin importar el género en su red de trabajo les ha permitido generar nuevas habilidades en sus equipos y mayor capacidad de análisis para prepararlos en un mundo en constante movimiento
buscan mayores acciones de responsabilidad social, pues de acuerdo con Fortune 500, desde 2012 las empresas que contaban con mujeres en sus mesas directivas solían impulsar mayores estrategias ESG y en búsqueda de mejorar el entorno social, ambiental y laboral
Según la experta, las empresas deben “cambiar el chip” para obtener nuevas perspectivas, talentos y estrategias que les permitan adaptarse a la realidad social y económica del siglo XXI y esto es posible abriendo paso cada día más a mujeres, quienes pueden aportar nuevas maneras de hacer negocios y un liderazgo colaborativo, integral y enfocado en resultados para el nuevo panorama empresarial.