La tecnología avanza a gran velocidad y aunque esto suele beneficiar a las personas, también puede propiciar el tratamiento inadecuado de datos personales, especialmente el de grupos vulnerables como lo son niños, adolescentes y adultos mayores, afirmó el Instituto Nacional de Transparencia y Protección de Datos Personales (Inai).
Por su parte, una adecuada protección de los datos personales puede ser un catalizador para desarrollar infraestructura viable, sostenible, resiliente y de calidad; asimismo, dijo que este derecho puede apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano, destacó la comisionada del organismo, Josefina Román Vergara.
Por lo anterior, pusieron en marcha la Ruta de la Privacidad para promover la importancia de la protección de datos personales en las tareas cotidianas, para que la sociedad conozca la manera de ejercer su derecho a la misma, específicamente en las cuestiones digitales.
Esta política además está encaminada a cumplir el noveno objetivo de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 que se refiere a construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la educación e innovación.
¿Cuándo se vulneran los datos de niños y adolescentes?
El DIF establece que cualquier manejo directo de la imagen, nombre, datos personales o referencias que permitan la identificación de niños y adolescentes en medios públicos o de comunicación, incluidas las denominadas redes sociales, sin que medie una autorización, es considerado una violación a su derecho a la intimidad y a la protección de datos personales.
Por lo que no pueden ser objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia; de divulgaciones o difusiones ilícitas de información o datos personales, incluyendo aquélla que tenga carácter informativo a la opinión pública o de noticia que permita identificarles, por ejemplo, fotografías o videos que muestren sus rostros y vulneren su privacidad.
Adultos mayores y sus datos al acceder a las tecnologías
Mientras que las generaciones más jóvenes tienen prácticamente habilidades natas para la tecnología, los adultos mayores suelen tener mayor dificultad para integrarse a los servicios digitales y para entender qué datos dejan y cuáles de ellos son públicos, dejándolos en riesgo.
De ahí que, en promedio, tres personas adultas mayores reportan al día ser víctimas de delitos cibernéticos, de acuerdo con la Unidad de Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México.
Por ello el Inai sugirió a este sector:
- Solicitar apoyo de personas de confianza cuando se necesite realizar algún trámite en físico o virtual
- utilizar contraseñas de mayor complejidad para proteger los dispositivos electrónicos
- evitar proporcionar datos personales a través de llamadas y correos electrónicos
- leer los avisos de privacidad
- evitar abrir correos electrónicos, documentos adjuntos o enlaces que envían personas que no conoce
- ingresar a páginas de Internet oficiales de establecimientos reconocidos
