El 91% de las personas tienen algún grado de conocimiento sobre el cambio climático y 97% está preocupado por las consecuencias que tenga esto, señaló el informe "Opinión pública internacional sobre el cambio climático, 2022", de la Universidad de Yale, que señaló el 38% de los mexicanos cree que el gobierno es el mayor responsable de reducir la contaminación.
Por otro lado, un 39% opina que deberían ser los individuos y el 20% que las empresas, la Coalición Potential Energy señaló que los mexicanos consideran que hacer frente a la crisis climática es una responsabilidad compartida, por ello, las campañas presidenciales serán foco de atención debido a las propuestas que se hagan entorno al cambio climático y transición energética.
Asimismo, una encuesta del Banco Europeo de Inversiones expuso que el 93% de los mexicanos considera que el cambio climático afecta su vida cotidiana y 75% afecta sus ingresos, debido a que las personas no hacen lo suficiente para enfrentar las consecuencias como tomar medidas climáticas inmediatas.
El estudio de IPSOS señaló que el 80% de los mexicanos cree que el país debería intensificar su lucha contra el cambio climático y el 67% piensa que el gobierno no trabaja lo suficiente en esa materia, ya que eso permitiría atraer mayores inversiones de Estados Unidos, por ello un voto informado puede contribuir para construir soluciones al cambio climático y transición energética.
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El papel de las elecciones en el cambio climático
La Embajadora para México del Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles (TNPCF), Isabel Studer, aseguró que se debe “empoderar a la ciudadanía” para impulsar la acción frente a la crisis climática, y eso implica un “voto informado” y razonado para promover el cambio hacia una transición energética para proteger a la población y evitar las consecuencias de inacción.
Studer indicó que atender la crisis climática debe ser una prioridad para el futuro gobierno “es revisar las propuestas en materia de cambio climático y transición energética de los candidatos”, lo cual requiere exigir que los candidatos de las elecciones 2024 incluyan temas en sus propuestas de campaña, con planes basados en ciencia, que son urgentes y necesarios para el bienestar de las presentes.
La embajadora mencionó que es necesaria una transición energética bien planeada para crear oportunidades económicas y beneficios sociales, en el caso de Claudia Sheinbaum, ha señalado su objetivo de hacer una transición energética acelerada, soberana, justa y sostenible, además plantea que el desarrollo sea nacional.
Además, prevé que sea el Estado el que garantice la autosuficiencia eléctrica sostenible los edificios gubernamentales estarán equipados con generadores fotovoltaicos y/o eólicos; por su parte, Xóchitl Gálvez señala que “la energía es un recurso esencial para fomentar el desarrollo integral de México”, mediante el mejoramiento de seguridad, salud, educación y empleos remunerados.
Lo cierto es que la política energética deberá basarse en tres principios transversales:
- el respeto al Estado de derecho
- la transparencia y la rendición de cuentas
- la alineación con la política social
Para lograr lo anterior, se requiere una rectoría estatal robusta con reguladores “impecables y responsables”, mientras que el Estado debe fungir como rector para planificar actividades respaldas por empresas estatales y poner al ciudadano en el centro de la política energética, por ello, las elecciones presidenciales ofrecen una oportunidad comenzar a adoptar tecnologías limpias y renovables.