Auditorías ambientales: herramienta clave para el cumplimiento

Las auditorías ambientales son esenciales para las empresas en la actualidad, permitiendo evitar sanciones legales y mejorar la reputación corporativa

Es bastante común que las empresas se centren en cumplir con regulaciones corporativas, fiscales y laborales, mientras que la normativa ambiental a menudo se queda en un segundo plano. Sin embargo, cumplir con la legislación ambiental y realizar auditorías en esta materia es crucial, tanto para evitar sanciones económicas como para mejorar la imagen corporativa ante consumidores y autoridades. En este sentido, la maestra Ninna Rippa, Senior Counsel en World Kinect Corporation, maestra en leyes por Florida International University; con más de 15 años de experiencia en firmas globales asesorando empresas multinacionales en asuntos comerciales, negociación de contratos, análisis y gestión de riesgo, con enfoque en cumplimiento regulatorio, litigio administrativo, derecho ambiental y cambio climático, tanto dentro como fuera de México, reflexiona sobre cómo las auditorías ambientales pueden servir como una herramienta preventiva para identificar y mitigar riesgos que podrían afectar negativamente a las empresas.

 ¿Por qué la materia ambiental debe ser estudiada por las empresas en la actualidad?

Considero crucial que las empresas de todas las industrias, aunque algunas más que otras, presten atención a las implicaciones de la legislación ambiental en el contexto jurídico actual. La relevancia radica en que, desde el punto de vista regulatorio, existen multas y sanciones significativas, especialmente en el sector de hidrocarburos.

Con la creación de la Comisión de Energía Ambiental y el desarrollo del marco normativo correspondiente, las penalizaciones para esta industria han aumentado considerablemente en comparación con otros sectores. No obstante, esto no significa que en otros ámbitos sea menos relevante; el cumplimiento de la normativa ambiental es esencial para todas las empresas, ya que las multas pueden ser considerablemente elevadas.

Es fundamental tener en cuenta los aspectos ambientales en cada operación, ya sea una compra, venta, fusión o cualquier otra acción relacionada con la adquisición de un nuevo negocio o propiedad. Incluso en el ámbito inmobiliario, los factores ambientales son cruciales, ya que pueden impactar significativamente a la empresa o al sector correspondiente.

Desde la integración de una nueva línea de negocio hasta la gestión de una empresa con décadas de operación, es importante ser consciente de posibles incumplimientos en la normativa ambiental que podrían no haberse contemplado inicialmente.

Además, la legislación ambiental ha experimentado numerosos cambios a lo largo de los años. A partir de la década de 1980, México ha mostrado un creciente interés por regular el ámbito ambiental, lo que ha dado lugar a múltiples modificaciones. Solo en los últimos diez años, ha habido al menos cinco reformas importantes en esta área; por tanto, es esencial que las empresas se mantengan actualizadas para evitar pérdidas económicas significativas.


En la materia ambiental, ¿cuáles son los principales aspectos que deben considerar las empresas?

Desde una perspectiva corporativa, es crucial considerar la creciente importancia de la imagen ambiental de las empresas ante los consumidores. Es fundamental que las organizaciones mantengan datos actualizados y realicen estudios sobre los impactos ecológicos de sus procesos productivos, así como del impacto de sus productos cuando se descartan como residuos.

El manejo de estos aspectos influye significativamente en la percepción pública de la empresa. Hoy en día, los consumidores valoran cada vez más cómo las compañías gestionan sus responsabilidades ambientales. Además, el cumplimiento de las normativas en esta materia es esencial debido a los frecuentes cambios en los parámetros relacionados con la contaminación del aire, el agua y el suelo. Aunque estos temas son complejos y abarcan un amplio espectro, son fundamentales para cualquier empresa.

¿En qué consiste una auditoría ambiental?

Una auditoría ambiental puede adoptar varios enfoques, pero generalmente se distinguen dos tipos principales. El primero se lleva a cabo al adquirir o vender un negocio, ya sea a través de una fusión o adquisición. El propósito de este tipo de auditoría es determinar el estado actual de la empresa en términos de posibles contaminaciones o el cumplimiento de normativas ambientales, como permisos y otros requisitos. Este proceso es crucial para identificar cualquier problema potencial que deba abordarse antes de concretar la fusión, adquisición o venta.

El segundo tipo es la auditoría preventiva, de gran importancia, aunque realizada por pocas empresas. Realizar este tipo de auditoría de manera adecuada puede resultar en un ahorro significativo de recursos, al ayudar a prevenir multas y otras consecuencias derivadas de incumplimientos regulatorios, que a menudo pueden pasar desapercibidos debido a cambios en la legislación. Esta auditoría no solo abarca aspectos ambientales, sino que también puede incluir cuestiones laborales, dado que ambos ámbitos están interrelacionados.

El incumplimiento de estos requisitos, que suelen ser muy específicos, puede acarrear sanciones económicas, la paralización de operaciones e incluso litigios prolongados. Lamentablemente, muchas empresas solo se percatan de estas deficiencias cuando es demasiado tarde, durante una inspección por parte de las autoridades ambientales, y es en ese momento, que deben enfrentar consecuencias financieras significativas.

¿Ese tipo de auditorías están contempladas en alguna legislación? ¿Son obligatorias o son voluntarias por parte de las empresas?

En términos generales, no son obligatorias. Aunque pueden ser requeridas en casos específicos por la legislación, las empresas no están obligadas a realizarlas de manera regular. No obstante, es altamente recomendable hacerlo. Muchas empresas, especialmente las internacionales, están adoptando una postura preventiva en lugar de reactiva, anticipándose a problemas en lugar de esperar a que ocurran. Esta estrategia ha resultado en ahorros significativos de tiempo, esfuerzo y recursos al prevenir problemas futuros.

Además, la realización de auditorías ambientales puede conducir indirectamente a la optimización de los procesos productivos. Desde un punto de vista legal, de cumplimiento normativo y económico, es una práctica muy aconsejable para las empresas.


¿Cuáles son los efectos de las auditorías ambientales, es decir, de sus resultados?

En el caso del primer tipo de auditoría, que se realiza previo a una compraventa o adquisición, los efectos son sumamente importantes. Proporcionan una visión clara del valor del negocio que se está adquiriendo, permitiendo una posición favorable en la negociación desde el inicio. Además, ayudan a prevenir problemas relacionados con la responsabilidad ambiental. En México, la responsabilidad ambiental suele ser solidaria en muchos casos, especialmente en los sectores corporativos y de manufactura. Esto significa que, si existe un daño ambiental al aire, suelo o agua, la responsabilidad generalmente recae en el propietario actual del predio, independientemente de quién haya causado el daño.

Un ejemplo práctico sería la adquisición de un terreno previamente utilizado para almacenar productos petrolíferos. Si ese terreno tiene contaminación en el suelo, la responsabilidad recae en el nuevo propietario. Si no se ha previsto una cláusula ambiental en el contrato de adquisición que permita reclamar daños y perjuicios al anterior dueño, esto puede resultar en pérdidas económicas importantes. En estos casos, una auditoría que incluya un análisis del suelo, conocida como “fase uno” y “fase dos”, proporciona una visión clara de lo que se está adquiriendo.

Para las empresas que ya están en operación, los efectos de las auditorías ambientales pueden ser variados. Pueden incluir la optimización de procesos productivos y el ahorro de recursos, tanto en términos de litigios como en multas y penalidades. Además, existe un componente importante relacionado con la imagen y reputación de la empresa. En México, mantener una relación positiva con las autoridades es crucial. Siempre es preferible ser visto como una entidad que cumple con la ley y colabora con las autoridades, en lugar de tener una reputación negativa por incumplimientos anteriores. Esto proporciona una ventaja a nivel de cumplimiento regulatorio y en la interacción con las autoridades.


¿Cuáles serían los principales beneficios de una auditoría ambiental?

Los principales beneficios de una auditoría ambiental son el ahorro de recursos económicos y de tiempo, la prevención de incumplimientos, el mantenimiento del cumplimiento regulatorio y el conocimiento claro de los requisitos a cumplir. Además, se destaca el beneficio reputacional para la empresa.