El Día de la Ciberseguridad 2024 sirvió para reflexionar sobre una pregunta esencial: ¿tu sistema antifraude impulsa tu negocio o lo frena? Con el comercio electrónico mexicano que alcanzó más de 658 mil millones de pesos en 2023, proteger las transacciones es más crucial que nunca. El desafío es claro: combatir el fraude sin sacrificar la experiencia del cliente.
El impacto del fraude en los negocios mexicanos
- Pérdidas económicas: Más de 293 mil millones de pesos anuales por fraude en pagos digitales.
- Decisiones críticas: El 31% de los compradores abandona una compra por temor al fraude, mientras los sistemas antifraude tradicionales generan falsos positivos, afectando clientes legítimos y las ventas.
- Evolución constante: Los estafadores perfeccionan sus tácticas, desde datos robados hasta suplantaciones de identidad.
¿Cómo evitar que el remedio sea peor que la enfermedad?
Las empresas a menudo enfrentan un dilema: reforzar la seguridad para reducir el fraude o priorizar la experiencia del cliente para aumentar las conversiones. La buena noticia es que es posible hacer ambas cosas. ¿Cómo lograrlo?:
Reglas flexibles: Combinar atributos como el monto, país y correo electrónico permite crear defensas más precisas. Revisar y actualizar las reglas regularmente asegura su efectividad frente a nuevas tácticas de fraude.
IA con control humano: El aprendizaje automático ayuda a identificar transacciones sospechosas, pero debe ser supervisado. Clasificar transacciones por nivel de riesgo y aplicar autenticación como 3D Secure solo en casos necesarios mejora la seguridad sin generar fricción.
Priorizar al cliente:
- Listas blancas: Facilita las transacciones de clientes frecuentes, eliminando barreras innecesarias.
- Autenticación adaptativa: Activa medidas de seguridad solo cuando el riesgo es alto, asegurando una experiencia fluida para la mayoría.
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Prevenir el fraude como ventaja competitiva
Esto no solo reduce pérdidas; es un diferencial que genera confianza. El 78% de los consumidores mexicanos prefieren comprar en empresas con medidas sólidas de seguridad. Al usar herramientas que detectan y previenen el fraude de manera proactiva y protegen los datos de los clientes, se presenta una oportunidad para generar confianza del cliente en tu marca, fortalece la fidelidad y mejora tu posicionamiento
Tendencias como redes de identidad compartida, plataformas integradas de pago y antifraude en una sola plataforma, y cumplimiento automatizado (desde KYC conoce a tu cliente, hasta AML (Anti-Lavado de Dinero), están transformando la prevención de fraude. Adoptar estas tecnologías no solo protege, sino que posiciona a las empresas como líderes en el entorno digital.
La prevención del fraude ya no es solo una herramienta de seguridad, sino una estrategia para el éxito. En un mercado competitivo y digital, proteger tu negocio y cuidar la experiencia del cliente es la combinación ganadora.
