Hay muchas personas que llegan al buró de crédito y no lo saben.
Este tiene como función registrar el comportamiento crediticio de las personas y refleja el tipo de clientes que somos a través de la puntualidad de los pagos y nuestra actividad; sin embargo, hay algunos aspectos y actividades que no sabemos que nos conducen al buró sin saberlo.
Ante ello la empresa de servicios financieros digitales Stori recomienda tomar en cuenta los siguientes puntos.
Aunque comúnmente se piensa que el historial crediticio inicia hasta que tenemos alguna actividad cercana con un banco, esto no es así, hay actividades financieras cotidianas que podrían afectar nuestra calificación crediticia, tales como:
- los servicios de telefonía celular
- las tarjetas de tiendas departamentales
- pago de servicios a tu nombre como luz y agua
- falta de pago de impuestos
- errores en las fechas de pago de tarjetas o pagos incompletos
- simplemente de usar las tarjetas de débito o crédito sin pagar las comisiones generadas
A pesar la información de nuestra actividad crediticia queda por un largo período en el sistema, estar en buró de crédito no es una condena para no poder salir de este estado, hay opciones para ayudar a las personas a crear o reconstruir un historial crediticio sólido sin importar que estén en buró de crédito.
Por lo que aunque llegar al buró de crédito no muestra los pagos puntuales y adecuados, indica nuestras actividades y puede verse afectado con notas negativas que en suma pueden derivar en el rechazo de créditos, es importante saber que debemos empezar nuevamente nuestro historial para mejorarlo.