La búsqueda del departamento ideal puede ser una experiencia emocionante que a su vez implica un compromiso a largo plazo y una fuerte inversión, por lo que elegir el crédito adecuado para cada situación es esencial a fin de evitar deudas que más adelante no podamos pagar, indicó Flat.mx
“El primer paso será investigar los tipos de financiamiento que existen en el mercado y conocer nuestra capacidad de pago, ante lo que deberemos establecer un presupuesto y juntar cerca del 30% de enganche: a mayor enganche, menor será el pago en las mensualidades. Existen muchas instituciones en las que puedes pagar menos, pero no lo recomendamos”, indica el team de la proptech.
En ese sentido, explicó que los créditos hipotecarios son una forma de ayudarnos a solventar el pago de una propiedad. En el mercado existen diversos tipos, desde los otorgados por instituciones gubernamentales como Infonavit y Fovissste, hasta los otorgados por las instituciones bancarias y los esquemas de financiamiento inmobiliario.
Los financiamientos más populares en este tipo de transacciones son los otorgados por las instituciones gubernamentales, ya que éstos se relacionan directamente con la empresa donde laboran los derechohabientes, aunque no todos pueden acceder a este tipo de créditos, por lo que la firma compartió la siguiente información sobre los tipos de financiamiento, cómo funcionan y los requisitos de cada uno.
Instituciones gubernamentales
Infonavit: Este crédito está disponible para los trabajadores de las empresas privadas que gozan de los beneficios del Seguro Social y de la Ley del Trabajo en México. Funciona a través de una Subcuenta de Vivienda, es decir, se trata de un ahorro indispensable al solicitar un crédito hipotecario Infonavit que podrá ser utilizado siempre y cuando se cumplan los requisitos necesarios para recibir este financiamiento.
Los principales requisitos para crédito Infonavit 2022 son:
estar laborando y cotizando ante el Infonavit.
tener un mínimo de 116 puntos (es importante realizar la precalificación para confirmar que se reúnen los puntos mínimos).
ejecutar una planificación presupuestaria familiar de gastos y egresos.
cursar el taller en línea “Saber para Decidir Mejor” con el que se podrá definir el tipo de crédito a solicitar.
Fovissste: A diferencia de Infonavit, los trabajadores deben laborar en dependencias estatales o federales, es decir, un trabajador del estado. Éstos también cuentan con una cuenta de ahorro llamada Sistema de Ahorro Para el Retiro (SAR); la cual se divide en tres subcuentas: retiro, ahorro solidario y vivienda.
Los derechohabientes deben cumplir con distintos requisitos para poder acceder a un crédito hipotecario como:
ser trabajador activo del estado
tener 18 meses o más de aportaciones a la cuenta SAR
no estar pagando otro crédito o haber tramitado un retiro voluntario recientemente
ser mayor de 25 años y menor de 70 años
contar con los puntos Fovissste necesarios para acceder a un préstamo. Esto depende de distintos factores, como edad, número de aportaciones seguidas y la cantidad de ahorro en el SAR
Instituciones bancarias
Los bancos ofrecen opciones de financiamiento inmobiliario de acuerdo con los ingresos y capacidad de pago de los interesados. “Al inclinarte por esta opción, es necesario que investigues a detalle lo que cada banco ofrece y hacer una comparativa entre: tasas de interés, plazos, montos máximos a financiar, porcentaje de enganche obligatorio y valor de la vivienda. En nuestro portal puedes encontrar una herramienta de preaprobación de crédito en 3 minutos que recibe opciones de todos los bancos.
Esquemas de financiamiento inmobiliario
Estos financiamiento son poco conocidos, aunque existen varias empresas que son una opción para los que no son derechohabientes o no pueden acceder a un crédito bancario.
Las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (SOFOMES) son instituciones que otorgan financiamientos inmobiliarios bajo la regulación de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), y la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).
Existen dos tipos: las reguladas y no reguladas. Las no reguladas son vigiladas constantemente por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), por lo que ambas son confiables y otorgan préstamos financieros para comprar vivienda.