Aunque el financiamiento es el motor que impulsa y ayuda a sobrevivir a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), siendo estas últimas las principales generadoras de empleo en el país, los servicios que ofrecen los bancos dificultan la obtención del mismo a las organizaciones, un problema que las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (SOFOM) se han encargado de atender.
De hecho, un reporte del Banco de México (Banxico) con información de Buró de crédito, expuso que el 60 % de las empresas en México obtienen su primera línea de crédito mediante una SOFOM por las facilidades que estas ofrecen a sus clientes.
No obstante, el acrónimo que las rige como entidades no reguladas nos les ha permitido adquirir la confianza internacional que necesitan para seguir desarrollándose y por supuesto, crecer, lo que las mantiene en una marcada desventaja ante la banca privada, aun cuando ambas instituciones cumplen el mismo cometido, impulsar a los pequeños y medianos empresarios.
SOFOMES permiten mayor inclusión financiera
Datos de la ASOFOM revelaron que el 99.98 % de las empresas en México son Pymes y el financiamiento es su principal motor para sobrevivir, de ahí la importancia que tienen las SOFOM para este sector, y es que además, la información expuso que estas entidades representan representan el 20 % del sector privado del país y el 30 % del total de emisiones de deuda en el mercado de valores.
Enrique Presburguer Cherem, presidente nacional de la Asociación de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (ASOFOM), dijo en el “Encuentro con Periodistas 2022”, que estas entidades registradas ante la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), deben reconocerse como “Entidades No Vinculadas” cuando se creen.
Presburguer Cherem puntualizó en que las SOFOM son la “es la clave de la inclusión financiera y el financiamiento de las pequeñas y medianas empresas”; sin embargo, sentenció que la imposición de nuevas regulaciones, multas y disposiciones en los últimos 15 años ha entorpecido las operaciones de estas y de las cinco mil entidades que existían, ahora solo quedan mil 500, por ello, urgió a las autoridades a:
- eliminar el acrónimo de Entidad no Regulada y reemplazarla por Entidad No Vinculada cuando se crean
- agilizar emisiones bursátiles de las SOFOM
- reactivar fondeo y rediseñar estructuras de elegibilidad y fondeo con banca de desarrollo (FND, FIRA, NAFIN)
- eliminar la restricción de la reforma fiscal que impide deducir cartera vencida al presentar la demanda
- establecer ante la CONSUDEF, protocolos de usurpación de identidad y nuevas disposiciones para el sector financiero
- propuestas ante la UBVA para la originación remota (on boarding digital)
- programas de fondeo internacional inédito con fondos institucionales americanos y europeo
- no se implementen reglas o trabas que entorpezcan sus operaciones
- no se sobrecarguen las cargas impositivas
- que la banca de desarrollo apoye a estas entidades
- que haya más dinero fluyendo de la banca de segundo piso
Panorama en números
Jorge Avante Arcos, director general de ASOFOM, compartió con información de Buró de Crédito, que hasta junio de 2021 había $12 billones de crédito en México, de los cuales, 940 mil millones, es decir, el 7.2 % correspondió al sector SOFOM.
Además, durante la pandemia, mientras el sector bancario se contrajo un 10% anual, 20 % agregados, las SOFOMES, crecieron 20 % en 2020 y en 2021 se mantuvieron y rescataron a las Pymes sin apoyo gubernamental en líneas de crédito gracias a su flexibilidad, seguridad y la adaptación que se tiene hacia los clientes.
Por otro lado, los números reflejaron que en la región centro del país se concentra el mayor porcentaje de cartera de socios de este sector:
- región centro 44 % en cartera
- región suroeste 29 % en cartera
- región noroeste 13 % en cartera
- región norte 10 % en cartera
- región occidente 4 % en cartera
Finalmente, Enrique Presburguer Cherem puntualizó en que México necesita más competencia financiera para detonar la actividad económica del país, pero para ello, se necesita un trabajo conjunto con las autoridades que atiendan sus necesidades y haya una equidad entre las regulaciones que se hace a la banca privada y a las SOFOM para estar en igualdad de condiciones.