En diciembre de 2021 el índice de la Inversión Fija Bruta, con cifras desestacionalizadas, se ubicó en 94.6 puntos, cifra que implica una fuerte alza de 2.2% mensual respecto a los 93.5 registrados en noviembre, informó Monex.
Con esta cifra, el avance total de la inversión en todo el año fue de 10.3% luego de que en 2020 cayera en 18.1%.
"La inversión continúa siendo el “talón de Aquiles” de la economía mexicana, pues de todos los componentes de la demanda agregada es el que aprovechó menos el rebote inercial tras la reapertura de la economía y se constituye como la principal atadura para el avance integral de la economía", subrayó.
Asimismo estimó que las perspectivas siguen siendo poco alentadoras, pues el sentimiento interno no ha mejorado y el sentimiento externo se verá afectado por la invasión rusa a Ucrania, por lo que esperamos que en 2022 el avance sea de solo 3.5%. Tras el dato, el peso se ha apreciado 0.03% hasta los $20.82 por dólar.
El organismo indicó que la brecha para la recuperación todavía es significativa, aunque es importante recordar que los niveles máximos del índice se alcanzaron en 2018. Este comportamiento se suma a las señales de que la economía tuvo una mejora relativamente generalizada al cierre de año, lo que agrega algo de resiliencia a las variables previo a un inicio de 2022 bastante turbulento.
A detalle, el alza del mes obedece enteramente a la categoría de maquinaria y equipo pues fue la única que tuvo variaciones positivas. Desde que se superara la primera etapa de los confinamientos, este componente ha tenido un comportamiento mucho más dinámico de la construcción y al mes de diciembre logró colocarse por encima de sus niveles de inicios de 2020.
A su vez, es la inversión en activos importados la que tiene el principal mérito, pues creció en 18.9% durante todo 2021 tras haber caído 18.0% el año previo. La estabilidad en el tipo de cambio y la rápida reactivación de la industria automotriz, entre otros factores, habrían permitido esta destacada evolución.
En contraparte, la inversión en construcción tuvo una variación mínima de 0.0%, con lo que solo tuvo 5 meses de avances significativos en los 12 meses del año. Durante dicho periodo, el crecimiento total fue de 5.8% y durante 2020 la caída fue de 17.4%, cifra que debe sumarse a la contracción de 3.5% observada un año antes. Aún con la debilidad mostrada, el sector logró que 2021 fuera su primer año de crecimiento desde 2015, cuando alcanzó su último máximo de 108.0 puntos.