Inclusión financiera requiere perspectiva de género en productos y servicios

Más de la mitad de los puestos de trabajo perdidos durante la pandemia fueron de mujeres

.
 .  (Foto: iStock)

La brecha de género en el sector de los servicios financieros es evidente en todo el país, y es que mientras en las localidades de 15 mil o más habitantes solo el 48% de las mujeres tenía una cuenta bancaria, en contraste con el 55% de los hombres; en localidades de menos de 15 mil habitantes la cifra disminuyó a 42%, de acuerdo con Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2018.

En esta última zona, solo el 21% de las mujeres tenía al menos un crédito formal y en el caso de la vida urbana, el porcentaje fue de 33%; además, la encuesta expuso que solo el 65% de las mujeres mayores de 18 años contaba con un producto financiero; 31% con una cuenta de ahorro para el retiro; 35% una cuenta bancaria y el 23% un seguro.

Asimismo, la Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares 2019 indicó que las mujeres tenían ahorrado un 80% menos que los hombres por su menor permanencia en los empleos formales y la reducción drástica del trabajo, problemas que se agudizaron con la pandemia y afectaron el bienestar y desarrollo de todas las mujeres.

Además, más de la mitad de los puestos de trabajo perdidos durante la pandemia fueron de mujeres y se estima que solo en 2021 se perdieron aproximadamente 11.6 millones de empleos de mujeres, quienes ahora representan apenas un tercio de la fuerza laboral.

Con la intención de abrir un espacio de análisis y discusión sobre la inclusión financiera de las mujeres, las oportunidades de emprendimiento y su participación en el mercado laboral y la economía, la CONDUSEF, INMUJERES y la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) realizaron el Foro “Finanzas, Género e inclusión”, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

En el evento, Nadine Gasman, Presidenta de INMUJERES dijo que el sistema financiero no toma en cuenta las necesidades y circunstancias particulares de las mujeres, lo que hace que el sector carezca de perspectiva de género interseccional.

En tanto, Sofía Belmar, Presidenta de la AMIS, expuso que solo cuatro de cada 10 mujeres cuentan con un medio de ahorro formal, afectando así su autonomía económica, por ello, argumentó que se necesita crear “una oferta de servicios con perspectiva de género” para garantizar que garantice que las mujeres accedan a los beneficios sociales y económicos de los productos financieros.

Finalmente, Oscar Rosado, Presidente de la CONSUDEF, reconoció que solo una de cada seis entidades financieras en el país ofrece productos o servicios diseñados para mujeres, por lo que dijo, se requiere de más servicios y productos financieros diseñados con perspectiva de género, ya que “la libertad financiera es el único medio” para una vida plena, lejana a la violencia y “la dependencia del sistema patriarcal a las mujeres”.