Muchos empresarios, especialmente jóvenes, comenzaron a invertir en proyectos de responsabilidad social, pues a diferencia de los baby boomers quienes heredaron riqueza de la generación X, los millennials y generación Z buscan crear su patrimonio con un propósito de vida y nuevos hábitos de inversión, indicó el director senior de LCR Capital Partners, Víctor Espinosa.
Las nuevas generaciones han sido moldeadas por factores sociales, económicos y tecnológicos, por ello, están generando nuevos estándares sobre los productos de inversión y asesoramiento, de hecho, de acuerdo a su perfil, el nuevo inversionista no quiere ser tratado como un segmento, sino como un individuo que recibe consejos y asesorías a la medida.
Al respecto, la consultora Capgemini aseguró que los inversionistas necesitan prepararse para la transferencia intergeneracional de riqueza, ya que cuatro generaciones están interactuando en el escenario económico y financiero, y en el caso del inversionista en América Latina, predomina el sexo masculino de entre 30 y 59 años, económicamente activos y emprendedores, según Thinkinworld y Real Time Data.
Víctor Espinosa dijo que el perfil del nuevo inversionista se caracteriza porque son más jóvenes y experimentados con una actitud más abierta al riesgo y una mejor diversificación en sus portafolios e interés en generar inversiones en el extranjero que ven a Estados Unidos como un destino privilegiado para una mejor calidad de vida.
De acuerdo con ONE Sotheby’s International Realty, quienes van a Estados Unidos buscan invertir y comprar bienes raíces, y tan solo la mitad de los mexicanos que compran vivienda allá, lo hacen con el fin de tener una residencia permanente, 25% para radicar de forma parcial y 25% para fines de inversión, en tecnología (51%), construcción (31%) y sector financiero (21%), especialmente en Miami y Nueva York.
Según la Asociación Nacional de Corredores de Bienes Raíces, en 2020 los mexicanos se ubicaron en el cuarto lugar de extranjeros que más compraron casas en Estados Unidos; en el caso de Miami, el mercado inmobiliario de Florida recibe entre mil y mil 200 personas que se mudan a diario por ser lugar multicultural.
En tanto, en el caso de Nueva York, comprar una propiedad residencial es una buena inversión, por su fortaleza del mercado y comodidades de la zona, y desde febrero de 2021, el número de contratos firmados para condominios en Manhattan aumentó 55% interanual.
Por lo anterior, el director senior de LCR Capital Partners sugirió que los inversionistas se preparen para la transferencia de riqueza intergeneracional, con inversiones diversificadas que brinden estabilidad económica a sus familias y generaciones futuras.