Las criptomonedas se convirtieron en una moneda disruptiva que no solo implicaba la “no fiscalización” sino que además representaba una atractiva herramienta de inversión pues su valor se incrementaba a pasos agigantados.
Los altibajos que representan estos activos digitales se pueden reflejar en la serie de caídas que se acompañan de picos de recuperaciones cortas y sorpresivas; tan solo en este 2022 vimos la caída más grande de esta divisa, incluso, carteras como Bitso cancelaron sus retiros por un tiempo.
Las actividades se reanudaron en septiembre, hasta que a principios de noviembre FTX –el segundo intercambio de criptomonedas más grande del mundo– se declarara en bancarrota, y le siguieran el desplome en los precios de Bitcoin y Ethereum.
En este contexto, cabe la pregunta, ¿aún se puede confiar en las criptomonedas para ahorrar, intercambiar o invertir?
De inicio es importante destacar que la manera en la que tomamos las noticias respecto a lo que pasa en el universo del Blockchain tiene que ver en gran medida, con las emociones que reflejan los medios al compartir estas comunicaciones.
“Si bien los medios reaccionaron de una manera predeciblemente emotiva, lo que es fascinante es cuán tranquilas se mantuvieron las conversaciones (públicas) en la web. La pregunta es: ¿el público –y los verdaderos comerciantes de criptomonedas– está compartiendo sus emociones en línea, o están manteniendo la calma y haciendo caso omiso de los colapsos de los medios cada vez que una moneda de renombre pierde valor o se derrumba un intercambio importante? O, ¿quizás la mayoría de la población lo considera un incidente marginal o hasta cierto punto, irrelevante?”, señala Roger Darashah, co-fundador de LatAm Intersect PR.
Tal como lo apunta Darashah, otros expertos consideran que el tono emocional de las conversaciones pudo influir en lo que sucedió con FTX y por consiguiente en la pérdida de algunas inversiones.
Es decir, como cualquier otra inversión, apostar nuestro capital en criptomonedas conlleva un riesgo; no obstante, muchas veces el escuchar opiniones en vez de datos podría llevarnos a tomar una decisión equivocada.
Entonces, ¿cómo invertir?
Como lo explicamos anteriormente, escuchar opiniones puede nublar nuestra vista, pero también puede hacerlo escuchar datos que no entendemos del todo y en el tema de los cripto activos, pocos son expertos, por lo que lo mejor para empezar en caso de considerarlos como un instrumento atractivo, es siempre estar de la mano de un asesor.
El segundo consejo, de dominio popular, es no poner todo nuestro capital en un solo sitio. Es decir, cabe la posibilidad de que si invierto todo mi dinero en criptomonedas, estas crezcan 10 veces y con ello nos llevemos una buena suma, pero también de que pase todo lo contrario.
Entonces si una parte de nuestra capital está en una inversión de alto riesgo como este, otra parte en una de mediano riesgo y la otra en un fondo a largo plazo con un mínimo de riesgo, si una de ellas fracasa, aún tendremos una parte de nuestros ahorros.
Por otro lado, cabe recordar que una vez obtenidos los rendimientos, los expertos aconsejan no gastarlos, por el contrario, reinvertirlos y entonces, esos segundos rendimientos sí utilizarlos, de esa manera, las cosas nos saldrán “practicamente gratis”.