Cómo administrar tu salario para poder ahorrar

Una buen control de nuestro ingreso y gastos puede ayudarnos a lograr nuestras metas financieras y evitar crisis

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 .  (Foto: iStock)

Aunque el monto de nuestros ingresos es muy importante a la hora de cumplir con nuestras metas, lo más relevante, es la manera en la que administramos ese dinero que entra a nuestra cartera y los instrumentos que usamos para ello. 

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), un mexicano promedio distribuye su salario de la siguiente manera:

  • 40% pago de deudas
  • 22% gastos diversos
  • 18% comprar alimentos
  • 11% pago de renta o vivienda
  • 9% educación

No obstante, pocos destinan un porcentaje al ahorro, pues generalmente solo guardan lo que "les sobra".
En ese sentido, Mundo Ejecutivo compartió 6 consejos que te ayudarán a administrar mejor tu salario, sobre todo en esta época de alta inflación y con un alza histórica en el precio de los productos, alimentos y servicios: 

1. Realiza un presupuesto, por muy trillado que esto parezca, llevar un presupuesto permitirá tener una visión clara, y al mismo tiempo un control de los ingresos reales que se obtienen y qué cantidad de ellos se destina al pago de alimentos, servicios, deudas, renta, etc., También te permitirá destinar un porcentaje al ahorro

2. Paga tus deudas, si tienes deudas y el monto de las mismas es muy alto y los intereses están acabando con tus finanzas, una alternativa es recurrir un préstamo para poder liquidarla. Antes de solicitar un crédito, es importante que compares entre las diferentes opciones que ofrecen bancos y sociedades financieras, ya que en ocasiones la tasa de interés de los créditos personales es menor el de las tarjetas de crédito

3. Equilibra tus pagos, buena parte del salario se destina para pagar los gastos de los servicios, como luz, agua, gas e impuestos. Una alternativa para reducir los gastos es ahorrar en el consumo de luz, agua y gas para que pagues menos por ellos. En el caso de los impuestos, como el pago del predial, la mayoría de las entidades ofrecen descuentos en pagos anticipados, lo cual puede ser de gran ayuda

4. Analiza tus gastos, es importante que hagas un registro para conocer cómo estás gastando el dinero que obtienes por tu salario. Anota en papel o utiliza la tecnología para crear presupuestos y ver los porcentajes que asignas a cada cosa con respecto a tus ingresos. En función de ello, determina en cuál giro puedes ahorrar para que ese dinero lo designes a un plan de inversión.

5. Piensa a futuro, una vez que reasignes los recursos y sepas con cuánto dinero de tu salario dispones realmente; comienza a hacer un ahorro para lo que quieres y deseas lograr en un futuro, por ejemplo hacer un viaje, comprar un coche, estudiar una maestría, por mencionar algunos. Esto te ayudará a disciplinarte para ahorrar y conocer con qué cuentas para lograr tus objetivos. Si no sabes cómo empezar, busca quién te oriente en el tema.

6. Comienza a ahorrar, muchas personas piensan que como su nivel de ingresos es bajo no pueden ahorrar o que es imposible que algún día logren tener los recursos para comprar eso que tanto anhelan o realizar el viaje de sus sueños. Sin embargo, con una buena administración del salario, es posible tener finanzas más sanas. Trata de evitar comprar cosas que no son necesarias. Si bien, administrar tu dinero llevará tiempo y requerirá de algunos sacrificios que, a la larga, te ayudarán a ver la luz al final de túnel. 

Por otro lado, el medio sugirió llevar a cabo la técnica del 50,40, 10, que significa: 

  • Destina el 50% o la mitad de tu salario para cubrir tus gastos fijos como son: alimentos, pago de vivienda o renta, servicios médicos. Educación, pago de servicios como luz, agua, gas, internet.
  • El 40% puedes destinarlo para cubrir los gastos variables como saludas a comer, ropa, gimnasio, entretenimiento.
  • Destina el 10% de tus ingresos, como mínimo, para metas financieras de ahorro, si es posible, destina el 15% o hasta 20%, dependiendo de tu salario.

Los especialistas recomiendan no guardar tus ahorros en un cajón o debajo de tu colchón, mételo a una cuenta de ahorro o de inversión que a la larga te reditúe un porcentaje en ganancias. Consulta con las entidades financieras las opciones disponibles y decide en cuál te conviene tener tu dinero.