Los estragos causados por la pandemia del virus COVID- 19 en la economía por fin fueron reconocidos por el gobierno federal en el comunicado número 34, en el cual la SHCP hace entrega al Congreso de la Unión del documento de “Pre-Criterios 2021” de fecha 1o. de abril de 2020.
Los Pre-Criterios 2021 señalan que se han originado problemas en la disrupción de las cadenas de suministro a nivel global y volatilidad en los mercados financieros.
El gobierno de México manifiesta contar con diversos amortiguadores financieros y fiscales, para implementar medidas de política pública y que se prepara un conjunto adicional de acciones que ayudarán a reducir los impactos de los choques externos e internos sobre la economía, la liquidez internacional y las finanzas públicas; contribuirán a enfrentar los retos en materia de salud, empleo y liquidez de las empresas y los hogares en el corto plazo, protegiendo los ingresos y el bienestar de los grupos más vulnerables de la población; y fortalecerán la demanda agregada para reactivar la economía en el mediano plazo.
Entre los amortiguadores con los que se cuenta destacan:
- fondos y reservas para enfrentar contingencias en materia de salud, incluidas las de tipo epidemiológico
- recursos en el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), que al cierre de 2019 eran de 158.4 mil millones de pesos (mmp)
- reservas internacionales por 185.5 mil millones de dólares (mmd), una línea de crédito flexible con el Fondo Monetario Internacional por 61.4 md y líneas de intercambio de divisas con la Reserva Federal y con el Tesoro de los Estados Unidos por 60.0 y 9.0 mmd, respectivamente
- coberturas petroleras tanto del gobierno federal como de Pemex para compensar la disminución de los ingresos ante reducciones en los precios del energético
- perfil de deuda pública robusto, donde la deuda externa neta del Gobierno Federal solo representa 22 % del total y prácticamente el 100 % está a tasa fija
La realidad es que la posición económica de México no es alentadora, ya que parece lejos la publicación el DOF de la LIF 2020, en el cual se estimó un crecimiento del PIB de entre 1.5 y 2.5 %; sin embargo, trascurridos tres meses del año, se considera un rango de crecimiento del PIB entre -3.9 y 0.1 %.
Sin embargo, para 2021 se espera una recuperación de los efectos de la pandemia de COVID-19 y se estima que el crecimiento económico mejore con respecto a 2020 y se ubique entre 1.5 y 3.5 %, rango con base en la mejoría en la actividad económica que se espera desde el tercer y cuarto trimestres de este año, una vez que concluya la contingencia sanitaria.