La nueva normalidad y la salud contable de las pymes

Para recuperar la solvencia financiera tras la contingencia, los negocios deberán apostar por su digitalización

.
 .  (Foto: iStock)
Para recuperar la solvencia financiera tras la contingencia, los negocios deberán implementar buenas prácticas administrativas, tomar decisiones asertivas y apostar por su digitalización.

El regreso progresivo a las actividades empresariales tras la emergencia sanitaria, es la oportunidad ideal

para hacer una correcta planeación de los procesos internos. 


De acuerdo con Luis Velasco, Estratega Contable de Aspe, es fundamental hacer un balance de la situación financiera y contable en la que se encuentra una empresa, sin importar su tamaño, ya que de esta manera se tendrá claridad en cuánto se gana o se pierde

Para ello, es necesario implementar medidas que permitan afrontar esta coyuntura:

  • Estructurar bases para ajustar las cuentas por cobrar a su valor neto, ponderando la probabilidad y monto de incobrabilidad.
  • Revisar las condiciones de operación de los activos, evaluar el deterioro de estos y la posibilidad de venderlos, los beneficios futuros o las pérdidas que generarán al venderlos a su valor de mercado en situaciones de remates o venta directa para obtener liquidez.
  • Considerar gastos extraordinarios que se pueden incurrir por la actual situación como:
    • Nuevos compromisos, préstamos o garantías para obtener financiamiento
    • Aumentos de capital o emisión de instrumentos de deuda para tener continuidad en el negocio
    • Eventos relevantes para ajustar estimaciones o provisiones de activos y pasivos
    • Costos asociados a la inversión en nuevos activos
    • Modificación de acuerdos contractuales (arrendamientos)
    • Costos asociados a la implementación de tecnología y conectividad
    • Ajustes en materia de precios de transferencia
    • Gastos asociados al entendimiento, implementación, difusión y seguimiento del protocolo de seguridad sanitaria frente a la “nueva normalidad”

Aunado a retomar el buen control de las finanzas, es indispensable que las empresas cuenten con la infraestructura necesaria para seguir operando de manera remota; así controlan y automatizan sus procesos administrativos y contables en cualquier momento y lugar, acceden de inmediato a información clave para conocer de forma precisa qué está pasando en su negocio en tiempo real.