Durante la sesión de Parlamento abierto, organizada por la legislatura, la Coparmex externó su inquietud sobre el Régimen de Confianza para Personas Morales, pues está considerado como un estímulo fiscal, pero “no pareciera ser que se trata de un régimen opcional, sino obligatorio”.
Al tiempo, la representante de la Confederación Patronal de la República Mexicana, Patricia López Padilla, señaló que en el ya mencionado hay ausencia para deducir los anticipos pagados a socios de sociedades civiles y pidió que no se obligue a expedir declaraciones a los mayores de 18 años que se den de alta ante Hacienda.
En ese tenor, el director de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra) precisó que hay elementos relevantes del Régimen Simplificado a la Confianza y se aprovecha toda la información precargada en el SAT. Reconoció el régimen de depreciación acelerada para micro, pequeñas y medianas empresas, pero “preocupa su formato de implementación”.
Por lo anterior, Luis Manuel Pérez de Acha, especialista fiscal, comentó que es necesario armonizar y reforzar las disposiciones normativas sobre el régimen de confianza, especificar que todos los regímenes son opcionales y generar disposiciones espejo del régimen simplificado en el IVA y en el Código Fiscal de la Federación.
Aún más preocupantes las reformas a la LISR
El representante de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), Arturo Pérez Robles, manifestó su preocupación por las reformas a la Ley del ISR, porque podría ser inconstitucional, al ser posible la doble tributación y crear incertidumbre.
En ese sentido, desde la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Alejandro Alagón y Pedro Higuera, externaron dudas respecto al acreditamiento del ISR de estímulos, contra el ISR del ejercicio, la recaracterización de interés y el régimen de personas físicas en el sector primario.