En el artículo publicado por el Centro Interamericano de Administraciones Tributaria (CIAT) denominado “La Resistencia Fiscal”, su autor Dario González, realiza un análisis sobre la oposición del contribuyente a pagar sus impuestos.
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En su disertación el autor señala que esta reacción observada a lo largo de la historia en diversas culturas puede ser por la resistencia “per se” al impuesto o al sistema tributario y/o al nivel de presión tributaria. A continuación, se realiza una reseña de ambas posturas con base en lo abordado en el artículo “La Resistencia Fiscal”.
Resistencia “per se”
Para la psicología fiscal alemana la resistencia a pagar impuestos tiene su origen en la pérdida de la libertad que el sujeto percibe, en específico de su libertad de consumo y de su capacidad económica.
Por su parte, para la corriente de la psicología económica, el rechazo se debe a la relación costo beneficio que percibe el contribuyente; así el beneficio de no pagar es el ahorro fiscal y el costo se sujeta directamente con la posibilidad de ser descubierto y de las posibles sanciones.
Aquí el autor realiza una diferencia importante entre la oposición de las personas físicas y de las morales, ya que estas últimas con su resistencia buscan maximizar su lucro, por ello optan por la evasión o las planeaciones fiscales agresivas. Para las empresas, la responsabilidad social no comprende la responsabilidad fiscal.
Resistencia al sistema tributario y/o al nivel de presión tributaria
Bajo esta corriente existen dos enfoques:
- individualista del “auto interés”. Los sectores de más ingresos se oponen porque disminuyen sus riquezas y, en cambio, los de menores ingresos lo apoyan, por cuanto son beneficiarios de la redistribución de ingresos a través del gasto público, e
- ideológico. Tiene su base en el principio de solidaridad. La aprobación social al sistema tributario está basada en dicho principio; es decir, bajo este los sujetos buscan el bien común de la sociedad y la ayuda a los sectores económicos menos afortunados para lograr la cohesión social
En México algunas empresas prefieren crear fundaciones benéficas para dirigir sus ingresos a supuestas causas sociales que pagar sus impuestos.
Rebelión fiscal
Cuando se supera la tolerancia de la sociedad para asimilar los impuestos, suele haber un rechazo en forma colectiva y concertada, incluso violenta al que se le denomina generalmente “rebelión fiscal”. El entorno del contribuyente es esencial para identificar la resistencia ante la natural influencia social.
Cabe aclarar que la resistencia fiscal no es igual al incumplimiento, ya que la primera obedece a una reacción general, en tanto que la segunda resulta de un análisis racional del contribuyente que lo lleva a asumir el riesgo o el beneficio de incumplir.
Para combatir esta resistencia las administraciones tributarias han utilizados diversas estrategias las cuales se han consolidado con el uso de medios electrónicos y la inteligencia artificial para detectar a los posibles evasores e identificar ciertos comportamientos evasivos. Otras estrategias se enfocan en la educación tributaria para crear conciencia de los beneficios del pago de impuestos y simplificar los trámites.
Finalmente, como concluye el autor “al ser las causas del incumplimiento múltiples y variadas, las administraciones deben dar también respuestas múltiples pero oportunas, que necesariamente deben estar integradas.”
Fuente: González Dario, La resistencia fiscal disponible en: https://www.ciat.org/ciatblog-la-resistencia-fiscal/ fecha de consulta 23 de mayo de 2022
