Hay baja tasa de tributación sobre salarios por bajo ISR en América Latina y el Caribe en comparación con la OCDE. De hecho, México es el único país en el que los trabajadores con ingresos promedio debían pagar el ISR.
Los impuestos sobre los ingresos laborales del trabajador promedio de América Latina y el Caribe totalizaron el 21.7% del costo laboral total en 2013, cifra un tercio inferior a la de los países de la OCDE donde el promedio fue de 35.9%, según el infome “ Impuestos sobre los salarios en América Latina y el Caribe”, del Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Centro para el Desarrollo y el Centro de Política y Administración Tributarias.
Más del 90% de la diferencia entre América Latina y el Caribe y los países de la OCDE se debe al ISR personal (13% de los costos laborales).
En la región latinoamericana, debido a generosos subsidios específicos, la mayor parte de la fuerza laboral tiene ingresos que quedan por debajo del mínimo imponible para el ISR. La prevalencia de mercados laborales informales y la evasión impositiva también son factores que explican la baja recaudación del ISR.
Este nivel relativamente bajo de la cuña fiscal – que mide la diferencia entre los costos laborales del empleador y el correlativo salario neto del empleado – refleja tasas promedio muy bajas de ISR.
La interacción entre los umbrales de menores ingresos de las contribuciones a la Seguridad Social – generalmente a nivel de ingresos mínimos – y las tasas de contribución al programa de Seguridad Social eleva los costos de adhesión a los programas sociales para los trabajadores que se encuentran en los deciles bajo y medio-bajo.
En tanto, el costo de la participación en el mercado laboral formal, medido en términos de porcentaje de los ingresos, disminuye para quienes se encuentran en la mitad superior de la distribución salarial, con ingresos sobre el umbral mínimo.
