La transformación del sistema de justicia mexicano trae consiguió varias bondades, conoce cuales son
Sin duda la conversión del sistema de justicia penal mixto al de corte acusatorio, adversarial y oral busca garantizar la eficiencia, la seguridad jurídica, la imparcialidad, el profesionalismo y, desde luego, la celeridad en la resolución de los juicios en México.
Esto gracias a la oralidad, pues ésta permite agilizar los juicios y asegurar la transparencia del sistema, lo que genera confianza en los órganos encargados de administrar la justicia en nuestro país.
De hecho el licenciado Rafael Pinillos Suástegui, socio del despacho Castro y Pinillos, SC afirma que con este cambio, todos los actores del sistema, desde los Magistrados, Jueces, Ministerios Públicos (MP) y defensores, públicos o privados, sujetarán sus actuaciones a los nuevos principios rectores: publicidad, contradicción, concentración, inmediación, igualdad, oralidad y presunción de inocencia.
Asimismo precisa que esta reforma tiene como ejes rectores los siguientes:
- profesionalizar los cuerpos policíacos y del MP
- impedir el uso de las pruebas obtenidas mediante la violación de los derechos humanos
- generar confianza en la comunidad respecto de los órganos encargados de la administración de la justicia y, consecutivamente, lograr una participación más activa por parte de la ciudadanía en la presentación de denuncias y el combate a la impunidad
- establecer mecanismos alternativos de solución de controversias efectivos. Con esto se pretende resolver conflictos sin necesidad de contar con una sentencia definitiva, despresurizando así el sistema de justicia, y
- clarificar los hechos, proteger al inocente, procurar que el culpable no quede impune y reparar los daños causados por el delito
Del mismo modo en el tema “La nueva justicia penal” el licenciado Pinillos ofrece un panorama general sobre la transformación del sistema de justicia mexicano y sus beneficios.