México ocupa el lugar 140 de 163 países medidos en la décima edición del Índice de Paz Global, realizado por el Instituto para la Economía y la Paz de 2016. El país están tan solo por encima de la India, Egipto y Venezuela.
Cabe destacar que en 2015, el impacto económico de la violencia global fue de 2.12 billones de pesos, equivalente al 13.3 % del PIB global, que equivaldría a 1,876 dólares por cada persona en el mundo.
De igual forma, México se ubicó al final del listado regional, dentro de la clasificación de América Centra y el Caribe, debido al gran número de personas desaparecidas por la denominada "guerra contra las drogas".
De manera local, el gasto militar en México experimentó su mayor incremento desde 2003, al aumentar tres veces de 34,000 millones de pesos a 98,000 millones de pesos, que representa el 0.6 % del PIB en la nación. Además, el gasto en la seguridad doméstica aumentó 2.5 veces en comparación con 2003.
Los estados reportados como menos pacíficos fueron Guerrero, Sinaloa, Morelos, Baja California y Baja California Sur.
Cabe destacar que los países que obtuvieron mejores resultados en el reporte fueron: Islandia, Dinamarca, Austria, Nueva Zelanda y Portugal.
El índice mide el estado de paz en 163 países según 23 indicadores, los cuales tasan la ausencia de violencia o el miedo a la violencia. Destaca que los resultados del año demuestran que los niveles de paz permanecieron estables desde el año anterior, pero aún siguen más bajos que los de 2008.
El año anterior, el impacto económico total de violencia a nivel global alcanzó el 13.14 % del PIB, que equivaldría a la suma de las economías de Canadá, Francia, Alemania, España, y el Reino Unido.
Recientemente también se presentó el Índice de Paz de México, en el que destacaron las inversiones que se realizan en la implementación efectiva de reformas judiciales como la mejora en la recolección de datos y el descenso en los niveles de corrupción, así como el Nuevo Sistema de Justicia Penal.
“México tiene la oportunidad de alcanzar niveles más altos de paz, pero el país necesita confrontar dos problemas fundamentales: la administración de justicia y corrupción. Las mejorías tendrán beneficios directos, ya que los estados con menores niveles de paz, son los estados donde los niveles de corrupción se perciben como los más altos”, explicó Patricia Obeso, Presidenta del Instituto para la Economía y la Paz, el pasado 7 de abril en la presentación del documento.